Buenos Aires — La expresidenta Cristina Kirchner criticó en duros términos al plan económico del Gobierno y apuntó contra el presidente Javier Milei: “Se cree líder amado y admirado a nivel global, pero nadie le presta un dólar”. A través de un extenso escrito, quien fue la vicepresidenta del país hasta el 10 de diciembre del año pasado también consideró que “todo está muy mal”, se refirió al cepo cambiario y advirtió que el ajuste fiscal y el control de tres de los cuatro precios de la economía producen “un combo letal”.
Para Cristina Kirchner, quien presidió el país durante dos mandatos entre 2007 y 2015, la inflación mensual del 3% o 4% mensual representan “una verdadera tragedia social” a pesar de que “Milei y su inefable ministro de Economía (por Luis Caputo) quieren hacernos creer que es un éxito”. Es que a su juicio, estos niveles de inflación se dan en un contexto en el que el país se tornó caro en dólares al tiempo que atraviesa una “profunda recesión económica”.
Críticas al plan económico de Milei y Caputo
En primer término, el texto publicado por Cristina Kirchner este viernes en redes sociales se centró en el “cuadro de situación” que atraviesa la economía argentina bajo el Gobierno de Milei, al que definió como un “ultra libertario” en campaña pero que se transformó desde su llegada al Gobierno. “No sólo interviene y controla, sino que además decide tres de los cuatro precios fundamentales de la economía”, dijo en referencia al precio del dólar (vía el crawling peg del 2% mensual); del dinero, a través de una tasa “ultra negativa”; y del trabajo, al fijar topes para los acuerdos salariales.
“Solo ha liberado el cuarto precio de la economía; el de los bienes y servicios, aunque con ciertas limitaciones: las tarifas de luz, gas y el transporte todavía conservan exiguos subsidios, en algunos segmentos de usuarios, y el Estado sigue sin contar con datos fehacientes sobre los costos reales de esos sectores”, dijo.
Para Cristina Kirchner, si a esa administración de precios se le suma el ajuste fiscal de Milei, al que calificó de “inconsistente e insostenible”, se produce “un combo letal”.
Dicho escenario, en el marco de una economía bimonetaria como es la argentina, “ha llevado a una caída brutal de la actividad económica y ha provocado que nuestro país sea hoy más caro en dólares que los países desarrollados del mundo”, añadió quien fue la compañera de fórmula de Alberto Fernández en 2019. “Esa tragedia ya es inocultable”, destacó.
De acuerdo a la visión de la expresidenta, el Gobierno de Milei no sólo abandonó el discurso liberal de anti-intervencionismo estatal, sino que “también ha dejado de lado la teoría monetarista que señala a la emisión monetaria como la única y exclusiva causa de la inflación”.
“En reiteradas oportunidades los funcionarios han señalado que no van a devaluar porque sube la inflación”, argumentó antes de agregar: “O sea: la inflación en nuestro país está atada al movimiento del dólar. Bienvenidos a la Argentina”.
En otro pasaje del texto, Cristina Kirchner expresó su preocupación por la capacidad de pago del país. Para ello, recordó un escrito de su propia autoría publicado en febrero, en el que había señalado: “A diferencia de lo que se afirma habitualmente, en cuanto a que el principal problema de la economía argentina es el déficit fiscal y la principal causa de la inflación, la emisión monetaria necesaria para cubrirlo; nosotros sostenemos que la inflación en Argentina se dispara ante la escasez de dólares y que el endeudamiento compulsivo en dicha moneda no hace más que agravar dicha escasez”.
Al respecto, consideró necesario abordar “el verdadero problema de la economía argentina desde el rigor que impone la experiencia concreta frente a cualquier ejercicio teórico”. Y argumentó: “Hoy la Argentina no tiene los dólares para pagar la deuda y los mercados lo saben. Esa misma escasez de dólares fue la que impidió llevar a cabo la dolarización que Milei imaginaba como plan de estabilización”.
Acto seguido, añadió: “Curiosa paradoja de quien se cree líder amado y admirado a nivel global, pero al que nadie le presta un dólar. A esta altura de la soirée casi, casi que tenemos que hablar de Milei, el ex libertario”.
Cepo y economía bimonetaria
En otro pasaje del escrito, Cristina Kirchner pidió que se encuentre “una definición más rigurosa sobre la regulación para la adquisición de dólares” que la de cepo ya que señaló que “esa etiqueta fue utilizada para estigmatizar la medida que tuvimos que adoptar en el año 2012, después de una fuerte corrida cambiaria durante el año 2011″.
De acuerdo a la visión de la expresidenta, esa corrida cambiaria que se produjo durante el año electoral tuvo “la clara intención de provocar una devaluación del tipo de cambio que, de haberlo logrado, hubiera significado una enorme transferencia de ingresos a favor de los sectores que están dolarizados”.
“Lo curioso de aquella corrida impulsada desde el sector financiero, es que se produjo en el marco de una economía que, después de la crisis global de Lehman Brothers (2008-2009), crecía en forma sostenida y en un escenario de certidumbre política, traducida en el triunfo en primera vuelta por 55% de los votos”, escribió Cristina Kirchner. En rigor, en aquella elección obtuvo el 54% de los votos, mismo porcentaje que obtuvo Milei en el balotaje de 2023 sobre el total de votos emitidos.
“Quedó así al descubierto que los discursos del mainstream, acerca de la necesidad de certidumbre y estabilidad política y económica son solo eso, discursos”.
Desde entonces, recordó la ex jefa de Estado, Argentina sufrió corridas cambiarias recurrentes y señaló que “tampoco el gobierno de Macri” pudo evitarlas. “No sólo tuvo una fuerte salida de capitales sino que debió reinstalar el cepo que tanto había criticado y que había levantado en 2016 con bombos y platillos y gracias a un feroz endeudamiento externo. Se vio obligado a poner un tope de compra mensual de apenas 200 dólares”, expresó.
Dicha regulación, agregó, no pudo ser eliminada hasta el día de la fecha y continúa con el tope de 200 dólares a pesar de que “pasaron macristas, peronistas y ahora hasta libertarios, todo bajo el estricto control del FMI”.
“Esto no significa santificar el ‘cepo’, sino entender a partir de la experiencia y no desde la teoría, el funcionamiento de la economía en la Argentina frente a la cuestión del dólar”, sumó.
Por todo ello, Cristina Kirchner consideró que “abordar el problema de la economía bimonetaria y su correlato” y “la carencia de una moneda fuerte”, es lo que debería movilizar a las fuerzas políticas. Y alertó: “Cuando la anti política se quede sin respuestas por el fracaso de teorías extravagantes que solo causan odio y dolor; no solamente deberemos reconstruir la moneda, sino también la política”.