Buenos Aires — Los números son elocuentes: en los últimos 20 años, el Banco Central de la República Argentina (BCRA) emitió por el equivalente a US$270.000 millones para financiar al Tesoro. En ese mismo período, cada jefe de Estado dejó niveles de inflación superiores a los que recibió y apenas uno de los cinco mandatos presidenciales finalizó con una inflación acumulada inferior al 100%.
La aceleración de la emisión en la Argentina volvió a encender luces de alarma. Mientras el Gobierno insiste en calificar a la inflación como un fenómeno multicausal, estimaciones privadas marcan que el BCRA emitió cerca de 1% del PBI en un mes para asistir al Tesoro de manera directa e indirecta. De esta manera, continúa sumando combustible a una inflación que en abril alcanzó el 8,4% y seguiría trepando en mayo.
Pero esta tentación del actual equipo económico lejos está de ser novedosa. En las últimas dos décadas, el BCRA asistió al Tesoro por casi US$270.000 millones, lo que implica un ritmo de emisión promedio equivalente a US$13.500 millones por año. Así lo reflejó un reciente informe de la consultora EcoGo, que detalló que durante la actual gestión ya se emitieron pesos por más de US$85.000 millones, por lo que se convirtió en la segunda administración que más recursos recibió del Central en los últimos 20 años.
Maquinita sin respiro
Desde hace una década que en el hall de entrada del Banco Central de la República Argentina ya no puede leerse que su misión principal es preservar el valor de la moneda. Con la reforma de su Carta Orgánica de 2012, ese mandamiento fue reemplazado. “El banco tiene por finalidad promover, en la medida de sus facultades y en el marco de las políticas establecidas por el gobierno nacional, la estabilidad monetaria, la estabilidad financiera, el empleo y el desarrollo económico con equidad social”, marca ahora su artículo 3.
No se trató solo de un cambio de enunciado. La reforma de la Carta Orgánica de BCRA permitió ampliar los límites del financiamiento monetario, y durante la segunda presidencia de Cristina Kirchner la emisión monetaria se descontroló. El BCRA pasó de emitir el equivalente a US$35.800 millones entre 2007 y 2011 a casi US$105.000 millones entre 2011 y 2015.
Durante el gobierno de Mauricio Macri, entre 2015 y 2019, la emisión monetaria se desaceleró respecto del segundo mandato de Cristina Kirchner, pero aun así volvió a ubicarse en niveles equivalentes a los US$30.000 millones. Fueron unos US$27.800 millones, por encima de la emisión convalidada por el gobierno de Néstor Kirchner, equivalente a unos US$15.300 millones.
El instrumento más utilizado para asistir al Tesoro en estos últimos 20 años fueron los Adelantos Transitorios. Por esa vía, se giraron pesos por un equivalente a US$96.100 millones, de los cuales 43,5% fueron envíos durante el segundo mandato de Cristina Kirchner y casi un 27% corresponden a la actual gestión.
La actual gestión y el segundo mandato de Cristina Kirchner fueron también las dos administraciones en las que más utilidades distribuyó el BCRA. Los envíos fueron por montos equivalentes a US$30.600 y US$25.300 millones respectivamente.
Además de las dos principales vías que tiene el BCRA para financiar al Tesoro, los Gobiernos también han explorado otras fuentes de financiamiento: entre ellas la utilización de Letras Intransferibles (US$60.700 millones) y a operatorias de financiamiento indirecto como la emisión para recomprar títulos públicos, por el equivalente a US$17.300 millones en estos últimos años.