Buenos Aires — En el Gobierno argentino, se está elaborando un proyecto para agregar valor al litio que se produce en el norte del país. La redacción está en la secretaría de Asuntos Estratégicos, cuenta con el respaldo de YPF litio y buscan que sea promovida por la mesa del litio, que integran Catamarca, Jujuy y Salta, las tres provincias con este recurso clave para la transición energética y que hasta ahora se resisten a este proyecto.
Agregar valor, o no, al carbonato de litio, es uno de los debates que se están dando en las principales fuerzas políticas. Actualmente, Argentina es el segundo país con recursos de litio y el cuarto productor del mundo. En esa última categoría podría crecer en los próximos años si avanzan los proyectos en construcción.
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En Argentina el litio que se extrae de la salmuera se procesa y se exporta como carbonato de litio, cuyo precio gira en torno a los US$29.000 la tonelada. No obstante, hay corrientes que sostienen que el país debe generar un esquema para agregarle más valor al recurso.
Tenemos que ver cómo vamos a manejar nuestros recursos. Tenemos que saber qué vamos a hacer con el litio, si lo vamos a declarar recurso estratégico y conformar una asociación con privados y provincias
Cristina Fernández de Kirchner, vicepresidenta de la Nación
El proyecto, que por el momento cuenta con cierta resistencia de las provincias, apuesta a establecer cuotas para que las productoras de litio vendan un porcentaje de su producción para que sea industrializado en Argentina. Esa industrialización podría ser llevada a cabo mayoritariamente por una empresa pública, nacional o provincial.
Según pudo averiguar Bloomberg Línea, la industrialización estaría orientada a las baterías LFP, baterías de ion-litio con cátodo elaborado a base de litio ferro fosfato. Desde YPF Litio precisaron que para ese desarrollo se requiere mayoritariamente de carbonato de litio a lo que se suman otros elementos que deberían ser importados: grafito y carbonato de sodio, por caso.
Según Hernán Letcher, presidente de YPF Litio, que participó del Argentina Green Energy Summit organizado por IN-VR, esta industrialización permitiría vender el producto a triple del precio,
El porcentaje de la producción destinado a este proceso iniciaría en 5%, según el borrador que discute la mesa del litio, pero podría incrementarse hasta el 20%.
Este proyecto, que no ha sido presentado ante el Congreso y cuyo tratamiento estaría obstaculizado por el año electoral, ya ha recibido críticas de referentes en minería de Juntos por el Cambio, la principal fuerza opositora.
Críticas al proyecto de industrialización de litio
Los equipos técnicos de Juntos por el Cambio ya elaboran las ideas en el caso de que sean electos en las próximas elecciones presidenciales. En ese sentido, la minería y el litio representan asuntos estratégicos.
Santiago Dondo, ex subsecretario de Política Minera, que participa dentro del PRO, dijo a Bloomberg Línea que “esto de ir con una ley nacional parece exagerado”, y que “sería un ruido en la dirección incorrecta”.
Según Dondo, un proyecto de este tipo, en el cual se le obligue a las empresas productores (hoy son dos) a vender un porcentaje de su producción, “sería un ruido al buen clima inversor”.
Mario Capello, exsubsecretario de Desarrollo Minero, que integra el equipo de minería de Patricia Bullrich, dijo a Bloomberg Línea que un proyecto de este tipo “no es una buena idea”, y que el resultado “va a ser como Chile, que espanta inversiones”. Según Capello, “el valor agregado está en producir carbonato, hidróxido, ese es el verdadero valor agregado”.
Eso no significa que no haya que mejorar el actual marco productivo. “Hay cosas para mejorar, podemos buscar optimizar los beneficios para las provincias y crecer en el desarrollo de proveedores locales para que el boom de litio no nos pase por al lado”, dijo Dondo.
Sobre la industrialización, Capello dijo que “si se fabrican baterías está perfecto, quién se va a oponer, pero no que lo haga el Estado. El Estado no tiene capacidad para producir baterías”.
