Alec Oxenford anticipa “avalancha de dólares” y grandes inversores con base en Buenos Aires

Capítulo 671 La Estrategia del Día Argentina: Una entrevista especial con el miembro del Consejo de Asesores del presidente, Javier Milei, y managing partner en el fondo Myelin VC

Alec Oxenford de Alpha Capital
28 de agosto, 2024 | 04:30 AM

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Buenos Aires — En el capítulo 671 de La Estrategia del Día Argentina de este miércoles, 28 de agosto, @franaldaya te trae una entrevista especial con Alec Oxenford, fundador de OLX, letgo, DeRemate.com y managing partner en Myelin VC.

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“En concreto, los [grandes inversores y empresarios] sí están mirando seriamente a la Argentina. Una persona ... están buscando propiedades en Argentina para vivir. No es que se van a mudar, pero para tener una base en Buenos Aires, que es el comienzo para empezar a tener actividades seriamente acá”.

Alec Oxenford, asesor presidencial de Javier Milei.

Alejandro Carlos “Alec” Oxenford es un reconocido emprendedor argentino, conocido por cofundar OLX y letgo, dos plataformas online de anuncios clasificados.

Fundada en 1999, DeRemate se posicionó rápidamente como una de las principales plataformas de comercio en línea en América Latina, y luego fue adquirida por MercadoLibre. En 2006, junto con Fabrice Grinda, lanzó OLX, que rápidamente se convirtió en una de las plataformas de anuncios clasificados más utilizadas a nivel mundial, operando en más de 45 países.

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Cofundó también al SPAC (Special Purpose Acquisition Company) Alpha Capital, que terminó adquiriendo y fusionándose con la brasileña de big data e inteligencia artificial, Semantix. Es actualmente managing partner en el fondo Myelin VC, y miembro del directorio del marketplace OfferUp.

Nacido y criado en Argentina, Oxenford obtuvo una licenciatura en Administración de Empresas de la Universidad Católica Argentina y un MBA de la Universidad de Harvard. Actualmente reside en Brasil.

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“No descarto estar frente a un escenario en unos meses donde el problema de la Argentina sea al revés, que entren demasiados dólares”.

Alec Oxenford, asesor presidencial de Javier Milei.

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La siguiente entrevista fue editada por motivos de extensión y claridad. Se puede escuchar una versión más extendida de la misma en el podcast La Estrategia del Día Argentina.

Formás parte del Consejo de Asesores del presidente, Javier Milei. ¿Cómo estás viendo la situación en general en la Argentina, y qué te llevó a querer formar parte de ese grupo?

Esto es mi opinión personal, aclaro, porque el Consejo tiene un vocero que es Demian Reidel. Como Alec Oxenford y como argentino, aunque vivo en Río de Janeiro, y como entusiasta libertario desde hace mucho tiempo, creo que Argentina está entrando, tal vez, en la mejor oportunidad en mucho tiempo de dar vuelta un siglo de decadencia. Se han confluido muchas cosas importantes para que esto sea posible, y ojalá no nos frustremos una vez más con un fracaso. La sociedad argentina entendió y se cansó de un sistema adolescente y autodestructivo, que funcionó desde 1930 en Argentina, se profundizó en 1945 y se volvió cada vez más perverso en las décadas siguientes. En las dictaduras militares tuvo otro escalón más de perversidad, y ya se volvió asfixiante en los últimos 25 años. Tuvimos un régimen fascista que estaba basado en las ideas que imperaban en Europa después de la crisis de 1929, donde se puso en discusión el modelo de democracia capitalista, que había sido tan exitoso para Argentina desde 1853 en adelante hasta 1930, pero también para Europa, que había tenido muchos años de prosperidad, y para Estados Unidos. Pasaron a dominar ideas estatistas, corporativistas y totalitarias. Y esas ideas que tuvieron un crecimiento rápido se volvieron una verdad aceptada por las poblaciones de los países más educados del mundo. Tuvieron muchísimo impacto en la Argentina, y se trajeron para acá. Todas las restricciones a la libertad que hemos ido viendo empiezan en 1930. Se profundizan muchísimo después con el gobierno peronista y ya llegan al extremo total. La nacionalización de los servicios públicos, etc. Todo eso lleva a que en un país que tenía un capital acumulado fenomenal y un estándar de vida tan alto que recibió más inmigración per cápita que Estados Unidos entre 1900 y 1930, más que Australia, se haya entorpeciendo el funcionamiento de la economía. Esto llevó a decisiones sistémicas muy malas, cada vez más subóptimas, que terminaron generando un sistema que funciona con subsidios y tergiversando los precios relativos para poder continuar con el relato que se estaba imponiendo. Si hacemos un fast forward, llegamos hasta hace unos pocos años, donde gran parte de la economía está estatizada, donde los impuestos de los que pagan son de los más altos del mundo para los que pagan, y esto hace que caigan las inversiones. Como consecuencia se empieza a descapitalizar el país y pasamos de tener los mejores servicios públicos del mundo a tener los peores de cualquier país occidental. Pasamos de tener un sistema que atraía inmigrantes de a millones a un sistema que empezó a expulsar a la gente. Somos el único país del mundo que tuvo múltiples hiperinflaciones, sacando a Venezuela.

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¿Qué te hace pensar que los cambios que está proponiendo ahora Milei para ir hacia un esquema menos intervencionista, más liberal, pueden ser duraderos?

Por primera vez se ve en Argentina que ha habido un presidente que explicó las causas y las consecuencias del deterioro de Argentina desde 1930, y explicó también un plan y un tratamiento para empezar a revertir esa situación, con muchísimo detalle, con un plan de acción muy concreto. Este plan, a diferencia de los anteriores, logra empezar a cambiar la opinión pública. Esto no es solamente que la gente estaba harta del desastre que estaba viviendo, de inflación creciente, de un Estado totalmente paralizado, el pésimo manejo de la pandemia, etc. y votó cualquier cosa que había del otro lado. La gente empezó a entender la relación entre causas y efectos de muchas de las ideas incorrectas que habían comprado durante mucho tiempo, de que el Estado podía ser un problema y no solamente una solución. Durante 80 años, la vaca sagrada que no se podía cuestionar era el Estado. Todos los gobiernos, de izquierda o de derecha, militares, democráticos, ninguno achicó el Estado, excepto un poquito Carlos Menem. Pero ni siquiera eso fue muy sostenible, y después se revirtió. Se cuestiona la maraña de leyes que han trabado a la economía, y se cuestiona la mentira. Terminar con las vacas sagradas es algo muy sano, y es el comienzo de lo que puede ser una nueva era, donde se prioriza la verdad. Puede ser un proceso que lleve mucho tiempo, ojalá sea rápido, pero estamos queriendo revertir un proceso muy largo. Personalmente estoy muy sorprendido con la enorme velocidad a la que va este proceso. Se ha logrado bajar la inflación de 25% por mes a menos de 5% en pocos meses. Esto es más rápido que lo que fue la baja de la inflación cuando toma el gobierno Menem y muchísimo menos tortuoso que la salida de la convertibilidad. Cuando se sale de la convertibilidad hay una caída del producto bruto de 16%. Fue dolorosísimo, y generó un trauma absoluto en la población. La caída de ahora, estamos hablando de un 5%, con un ajuste mucho más cuidado, a pesar de que es más disciplinado y mucho más fuerte. Y por eso puede tener resultados de largo plazo mucho más confiables. Eso explica por qué a pesar de la recesión la gente apoya el cambio y al Presidente, porque ve que le dicen la verdad. Y eso es lo que me hace a mí ser muy optimista. No hay piquetes, de los que hemos tenido 400 por día, y la ministra Sandra Pettovello ha apoyado a las personas que requieren ayuda del Estado. La ministra Patricia Bullrich ha puesto orden en las calles, y tenemos una situación casi normal. No es muy diferente hoy a lo que se ve si uno cruza a Uruguay o a Chile. Ya empezamos a crecer en diferentes partes de la economía. Se arranca así.

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¿Argentina tendría más unicornios si los últimos 80 años hubieran sido más liberales? Hay quienes dicen que el ADN aguerrido del emprendedor argentino es fruto de haber lidiado con tantos obstáculos.

Sin duda que tendríamos mucho más unicornios y más compañías exitosas de tecnología si el contexto hubiera sido más estable. Te muestro las evidencias de esto. No surgieron muchas compañías competitivas de tecnología durante los años de altísima inflación, ni en los años peronistas de los ‘70, ni en los ‘80. Recién empiezan a aparecer en los ‘90 y aparecen todas juntas. Fue un periodo cuando, los que estábamos considerando construir compañías de tecnología nos lanzamos. Fuimos 70-80 compañías a la vez, y lo hicimos a mayor velocidad y con mejores resultados que Brasil, México y España. En la primera ola de Internet a fines de los ‘90, principios de los 2000, había más compañías valiosas de tecnología en Argentina que en todo el resto de América Latina más España y Portugal combinados. No es que esto pasó porque había un contexto volátil de alta inflación. Es al revés, pasó porque se dio una conjunción de factores. Uno de ellos fue que había capital humano y emprendedor listo para hacer esto. Y por supuesto a los emprendedores argentinos los cachetazos que les dio vivir en Argentina los ayudaron a ser más resilientes y disciplinados, seguro. Pero también el terreno fértil que supuso una macro estable, que permitió enfocarse en construir valor y no en sobrevivir a un contexto tan cambiante. Hay una cultura en Argentina de mirar el mundo de manera sana, de salir, de aprender, de estar dispuestos. No en muchos países tenés grupos que dicen, bueno, voy a hacer algo y lo voy a hacer internacional. Esa capacidad de competir afuera del país, y el orden, les permitió pensar a largo plazo y pensar en ir a levantar capital a Estados Unidos. Y hacer las cosas que hace falta para poder construir una compañía en los primeros años, que son los más cruciales. El famoso de cero a uno. Peter Thiel dice que hay dos momentos claros en la construcción de una compañía importante, de cero a uno y después de uno a cien. El cero a uno es la estabilidad; son bebitos frágiles, y si la gente tiene que estar ocupada en cómo hacer para pagar los sueldos porque subió el dólar, bajó el dólar, entró un cepo, cambió la inflación, no se puede, es imposible operar así. Después de uno a cien hay otras cosas, está la ventaja de la economía a la escala, etc. Argentina aprovechó las oportunidades del cambio de contexto global con la aparición de Internet como tecnología nueva. El mundo creía en Argentina, de manera que estas compañías podían financiarse en Estados Unidos a la misma tasa a la que se fondeaban los proyectos americanos. Ese es el otro cambio enorme, porque había una percepción de seguridad jurídica en Argentina después de varios años de convertibilidad. Todas estas compañías se financiaron capital extranjero, ninguna se financió capital argentino.

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¿Y ahora ves una ventana similar en el horizonte?

La palabra clave es horizonte. Creo que nadie lo sabe, pero puede ser que se esté generando un nuevo contexto donde otra vez se dé. Lo más difícil, que lo tenemos, es recursos humanos calificados, emprendedores con experiencia y esa hambre de conquistar el mundo. Nuevamente un Gobierno visionario busca cambiar el estatus quo y cambiar las reglas de juego, haciéndolas más liberales, integradas al mundo. Si se logra la estabilidad, que es el objetivo, y personalmente creo que se va a lograr, estamos en esa tendencia. Lo que nos falta es la aparición del cambio tecnológico al que subirnos. Podría ser inteligencia artificial (IA) o alguna versión de IA. Tenemos que ver el equivalente a lo que fue la aparición de internet a fin de los ‘90, porque uno no se puede subir a una revolución donde ya hay jugadores demasiado establecidos por todos lados, porque ya tienen mucha curva de aprendizaje que uno no tiene, y no se puede competir. ¿Por qué MercadoLibre domina el comercio electrónico y no lo domina Amazon? Bueno, porque Amazon llegó 10 años más tarde a Latinoamérica. Si fuese MercadoLibre y quisiera lanzar en Alemania hoy, donde Amazon ya está, sería imposible. Pero tal vez aparezca un nicho nuevo para competir de igual a igual porque no hay ventajas, ni de experiencia ni de escala. Eso es lo que tal vez pueda aprovechar Argentina. Es lo que creo que podría darse. Argentina se pasó 80 años expulsando al capital. Hay que ser duro para no darse cuenta. Bueno, por primera vez en 80 años, tenés un presidente y un gobierno que entienden que lo que necesita este país es capital, desesperadamente. Hace todo para atraerlo, y ya con mucho éxito, porque tenemos el RIGI, ya tenemos la inversión de Petronas y YPF, la más grande de la historia de Argentina, y parecería que van a haber más tanto en Vaca Muerta como en los minerales.

Calculadora de Inflación Acumulada

Fuiste con Peter Thiel a hablar con Milei, que por su parte se vio con Elon Musk, Tim Cook, Sundar Pichai y Sam Altman. ¿Por ahora eso es solo marketing, o esta gente verdaderamente está interesada en Argentina al punto de querer invertir en Argentina?

Sí, fuimos con Peter Thiel a la Casa Rosada a ver al presidente. Fue realmente una charla muy buena, donde al salir de esa charla, Thiel me dijo que se quedó muy impresionado con la persona del presidente y con sus ideas. Me dijo que el mundo, particularmente Occidente, necesita tanto las ideas de la libertad y un líder como Milei como lo necesita Argentina. Desesperadamente. Él ve, y yo también veo, que Occidente tiene un problema enorme, de un Estado totalmente sobredimensionado y de sobreregulación, que se nota menos que en Argentina, porque empezó más tarde. Europa no crece hace mucho tiempo. Lo que pasa es que está en un nivel tan alto de calidad de vida y es tan superior al resto del planeta, que a la gente le cuesta ver un problema en el modelo. Entonces se confunden. Tienen algunos sectores que son fenomenalmente competitivos, principalmente en tecnología, y que con ese valor agregado se financian otros sectores totalmente no competitivos. Y eso es lo que empiezan a ver algunos que dicen, mirá, estaremos bien, pero podríamos estar muchísimo mejor, porque es un disparate el nivel de regulaciones, de impuestos de obstrucción estatal a la actividad privada. En concreto sí están mirando seriamente a la Argentina. Una persona, no voy a decir quién, y me consta porque yo le presenté a la persona que lo está ayudando a hacerlo, está buscando propiedades en Argentina para vivir. No es que se va a mudar, pero para tener una base en Buenos Aires, que es el comienzo para empezar a tener actividades seriamente acá. No la he comprado hasta donde yo sé, hasta la semana pasada, pero está en proceso serio de búsqueda.

¿Un gran empresario o inversor?

Una de las personas que nombraste vos recién. No voy a decir quién, pero es muy positivo, porque empieza a ser parte de los planes de acción de estas personas, que hablan todos entre ellos. Mencionaste recién las visitas con Demian Reidel y Milei a esta gente de Silicon Valley, o la visita conmigo y Thiel a la Casa Rosada... Ningún presidente logró ese tipo de visitas en tan poco tiempo. Lo esencial fue que Milei quiso hacerlo, pero que las personas también lo quisieron hacer. Elon Musk no recibe a alguien porque sí. Todo el mundo se quiere reunir con él hoy. La gente ve un fenómeno muy inusual en Milei, que es alguien que democráticamente pone en la mesa una cantidad de ideas que son políticamente incorrectas para muchos, que tienen mucho sentido, y que son fundamentales. Ven que convence a la gente que las apoye. Había una especie de entendimiento de que el populismo y el estatismo habían ganado.

Esas fotos de Milei con estos grandes empresarios, ¿son representaciones de una gran oportunidad que tiene la Argentina?

Absolutamente. Hay algunas industrias que permiten cambios rápidos, porque crecen mucho más rápido que el resto de la economía y pueden generar valor sin tener activos legacy muy valiosos. La tecnología es uno de esos. Puedo crear una compañía como MercadoLibre sin tener que tener todos los galpones de Walmart y lo puedo hacer mucho más rápido. Igual, lleva 25 años. Pero no lleva 100 años. Si uno se enfoca en estas personas, y logra que empiecen a considerar seriamente a la Argentina, hay un espacio para acelerar este cambio de una nueva era, de una nueva época para Argentina, muchísimo. El gobierno tiene una tarea titánica, que es explicar que esta vez no es como las anteriores, porque las otras veces también se dijo que era nuevo, distinto y que las cosas iban a cambiar. Creo que esta es de verdad. A medida que pasan los meses, varios se van a ir dando cuenta. Los que se den cuenta primero, y los que inviertan primero van a tener retorno primero. Van a entrar más barato, y este es un momento muy atractivo para invertir en Argentina en muchas dimensiones. La bolsa subió bastante, pero todavía cuando la comparo como múltiplos de bolsas como las de Brasil, Chile o Colombia, todavía hay un recorrido. Si vamos a activos físicos como propiedades, el real estate en la Ciudad de Buenos Aires, en el interior y en campos, hay valuaciones que tienen un diferencial gigantesco. Es posible invertir y esto es antes de ponerse a invertir en plantas, infraestructura y en activos de muy largo plazo que requieren un payback más largo. Hay oportunidades de inversión muy atractivas, muy cortas en Argentina. Ya empiezo a verlos. Sé que han habido diferentes personas comprando campos en Argentina, porque les parece que tienen una base y empiezan a entender que Argentina puede ser un lugar en el que tiene sentido meter capital. En la medida en que se entienda las virtudes de RIGI, que cuando venga el primero va a venir el segundo, luego vendrá el tercero. El anuncio de YPF con Petronas es muy importante, y si se materializan, como espero, algunas otras más, de repente va a haber una avalancha. Todavía no llegó, pero es normal. Yo me hubiera imaginado que estaríamos con esta inflación de menos de 5%, dos años después de diciembre, no ocho meses después. Con el nivel de cuidado que tiene este gobierno, es increíble la velocidad en la que se está moviendo. Imagino que estas tendencias van a seguir, porque el presidente ya demostró que él no tiene ninguna intención de emitir, y si no hay emisión y no hay déficit, la inflación va a bajar. Y con la inflación un poco más baja en 2-3% en los próximos meses, será natural que la gente empiece a invertir. El horizonte para poder calcular el retorno de la inversión ya empieza a estar. Empieza a funcionar el capitalismo, ¿no? Los precios son atractivos, así que eso es un incentivo adicional. Y no descarto estar frente a un escenario en unos meses donde el problema de la Argentina sea al revés, que entren demasiados dólares, y que eso sea un problema al poner presión a la moneda. Puede pasar, de verdad no lo descarto. Federico Sturzenegger está cada día desregulando un sector nuevo. Es espectacular eso, en ningún país del mundo existe: alguien dedicado a desmantelar las obstrucciones a que la gente tome decisiones libremente para crear valor. Acá lo tenemos.