Buenos Aires — La negociación entre Argentina y el FMI dio ayer un paso adelante. De manera conjunta, comunicaron que alcanzaron un acuerdo respecto de los objetivos y parámetros centrales que serán la base para un Staff Level Agreement (SLA) que esperan anunciar esta semana. Pero el anuncio no eclipsa el hecho de que todavía restan cuestiones no menores por conocerse.
De anunciarse esta semana, el Staff Level Agreement debe ser aprobado por el Board del FMI, algo que difícilmente ocurra antes de las elecciones PASO. Recién una vez que se oficialice el SLA -que delineará las nuevas metas-, se avanzará hacia la quinta revisión del programa de Argentina, correspondiente al primer trimestre del año y cuyas metas no han sido cumplidas. Y entre el 31 de julio y el 1° de agosto, Argentina debería hacer frente a pagos por más de US$3.400 millones para los que no tiene reservas.
Todas estas son solo algunas de las dudas que se espera que se disipen en los próximos días.
Vencimientos
El lunes y martes próximos, Argentina debe hacer frente a vencimientos por US$3.426 millones. De ese monto, US$2.638 corresponden al pago de capital del corriente mes y los US$788 millones restantes a los intereses de agosto.
Con reservas netas negativas, a las que la consultora 1816 proyectó recientemente en niveles apenas inferiores a los US$-8.000 millones, los equipos técnicos del Gobierno y el organismo están buscando una solución técnica consensuada. En el oficialismo sostienen que todas las posibilidades sobre la mesa. Entre ellas, la posibilidad de hacer frente al pago con yuanes, aunque no es la primera opción que manejan en el equipo económico.
Si el Gobierno pagara los más de US$3.400 millones con yuanes, debería emitirle al Banco Central una letra intransferible, dados los límites fijados por la Carta Orgánica del BCRA para giros de Adelantos Transitorios y el remanente de Utilidades del año 2022.
Desembolsos
Otro de los puntos centrales que restan por conocerse son los montos que desembolsará el FMI para que Argentina pueda repagarle. Ayer a la noche, en una entrevista televisiva, el ministro de Economía, Sergio Massa, evitó precisar la cifra pero adelantó que se trata de un “paquete muy grande de desembolsos en agosto” que luego se complementaría con “un adicional en noviembre”.
¿De cuánto sería? Según Massa, es un monto “muy importante” y que “que cubre largamente las obligaciones para este año”. Según datos de la consultora Eco Go, en lo que resta de 2023 Argentina debe desembolsarle al organismo US$8.689 millones, por lo que el desembolso -si se cumpliera lo dicho por Massa- debería ser superior a esa cifra. Desde un sector del Gobierno incluso dejaron entrever ayer que serían cerca de US$10.000 millones.
Tiempos de aprobación
Incluso si el SLA se alcanzara esta semana, a esta altura resulta improbable que sea aprobado por el Board del FMI antes de las elecciones PASO del 13 de agosto. Ocurre que el directorio del Fondo entra en receso durante la primera quincena de agosto, por lo que recién volvería a reunirse hacia el 21 de agosto.
Esto implica que no habría desembolsos hasta que el directorio apruebe la quinta revisión. Esto representa un escollo no menor teniendo en cuenta que, por el estatuto del FMI, no se pueden postergar los vencimientos.
Quinta revisión
Una de las dudas que quedan entre analistas privados es bajo qué parámetro se aprobará la quinta revisión del acuerdo, que destrabará el desembolso de US$4.050 millones. Dicha revisión corresponde al primer trimestre de este año, período en el que se incumplieron dos de las tres principales metas del acuerdo.
Según datos de la consultora Romano Group, durante el primer trimestre el Banco Central acumuló US$2.300 millones, muy por debajo de los US$4.177 millones contemplados en la meta de acumulación de divisas. El Gobierno también incumplió la meta fiscal. Frente a un déficit permitido de $ 441.500 millones, en los primeros tres meses del año el rojo fiscal ascendió a $689.828 millones.
De las tres principales metas, solo se cumplió la monetaria: con una target de emisión fijado en $139.300 millones, el financiamiento directo al Tesoro ascendió a $130.000 millones. Sin embargo, ya en el segundo semestre el Gobierno le dio rienda suelta a la emisión y superó los límites pautados para todo el año.
Nuevas metas
En el Staff Level Agreement que el Gobierno y el FMI esperan anunciar esta semana se conocerán también las nuevas metas del programa, ante la expectativa de que a esta altura, las pautadas inicialmente parecen todas incumplibles.
Para este 2023, cabe recordar, el acuerdo con el FMI imponía un límite de financiamiento monetario de 0,6% del PBI, o unos $883.000 millones. Al 18 de julio, último dato oficial disponible, las asistencias directas del BCRA al Tesoro ya ascendían a $1,94 billones, más de un billón de pesos más que lo permitido.
De cara a este año, el Gobierno también se había comprometido a apretar el cinturón fiscal ya que el déficit debía recortarse desde los 2,5% puntos de 2022 a 1,9% del producto este año.
Por último, para este 2023, el acuerdo estipulaba que las Reservas Internacionales Netas del BCRA debían trepar a US$9.800 millones, unos US$4.327 millones más que los US$5.473 millones que, según había expresado el director del BCRA, Jorge Carrera, se habían acumulado durante 2022.