Buenos Aires — En estos días el Gobierno y las empresas del sector hidrocarburífero anunciaron avances en obras que permitirán aumentar la evacuación del gas y petróleo que se produce en Vaca Muerta, el yacimiento no convencional que hoy explica cerca de la mitad de la producción argentina.
Durante 2022, la capacidad de transporte fue uno de los limitantes del aumento a la producción de gas y petróleo en Vaca Muerta.
YPF inauguró este martes el oleoducto Vaca Muerta Norte, un caño que conecta sus áreas productivas de la cuenca neuquina con Puerto Hernández, un centro de abastecimiento desde el cual podrán exportar a través de Chile y también transportar a las refinerías de Luján de Cuyo, Mendoza.
Esta obra, que implicó inversiones por US$250 millones, consiste en un ducto de 150 kilómetros que transportará hasta 160 mil barriles de petróleo por día, ampliará en un 50% la capacidad actual de transporte de petróleo de Vaca Muerta y le permitirá a la compañía exportar por US$3.788 en 2024, según los cálculos de Pablo González, presidente de YPF.
Oleoducto y gasoductos
Desde el 1° de octubre, Oldelval aumentará su capacidad de transporte desde Vaca Muerta a Bahía Blanca en unos 20.000 metros cúbicos diarios, en el marco del proyecto Duplicar, con el objetivo final de aumentar la evacuación en 2025 hasta 86.000 metros cúbicos diarios. Actualmente, transporta 36.000 metros cúbicos diarios.
Este viernes el ministro de Economía, Sergio Massa, adjudicará la construcción del gasoducto reversal del norte, mientras que la semana próxima avanzará con las licitaciones del segundo tramo del gasoducto Néstor Kirchner, que conectará a la provincia de Buenos Aires con Santa Fe. Las empresas que participen de esta licitación, deberán proponer sus mecanismos de financiamiento.
Producción en Vaca Muerta
Según un informe de la consultora Economía & Energía, en los primeros siete meses del año la producción del petróleo se expandió un 9% interanual, producto del crecimiento del 29% del no convencional, con un declino del 3% de la producción convencional.
En lo que respecta al petróleo no convencional, durante los primeros siete meses de este año crecieron el 29%, una expansión moderada tras la suba del 56% entre el 2022 y el 2021. Durante el 2023 la participación del shale oil sobre la producción total de petróleo se mantuvo relativamente estable, en torno al 46%.
En gas natural, durante los primeros siete meses del año la producción “se mantuvo en un nivel relativamente similar al verificado en igual período del año previo”, dice el citado informe.
El gas no convencional, en parte, se expandió el15% respecto a los primeros siete meses de 2022 y su participación sobre el total de la producción de gas natural promedió el 42%.
Balanza energética
La secretaria de Energía, Flavia Royón, precisó que la balanza comercial energética pasará de ser negativa en US$4.400 millones en 2022 a un moderado superávit de US$100 millones en 2023.
Para 2024, la funcionaria proyecta un superávit comercial de US$3.800, mientras que para 2030 cree que ese número podría ascender a US$18.000 millones sin incluir los proyectos de Gas Natural Licuado (GNL).
