Bloomberg — Israel amplió el sábado sus ataques contra objetivos de Hezbolá en Líbano mientras el Gobierno sopesaba sus opciones sobre cómo tomar represalias contra Irán por un ataque con misiles a principios de esta semana.
Las Fuerzas de Defensa de Israel dijeron el sábado que su fuerza aérea atacó la infraestructura de Hezbolá en Beirut y otras partes del Líbano, sumándose a días de ataques aéreos. Los ataques se produjeron mientras el periódico israelí Haaretz informaba de que el ejército estaba preparando un ataque “significativo” contra Teherán después de que disparara unos 200 misiles contra objetivos israelíes a principios de esta semana. Gideon Saar, miembro del gabinete de seguridad israelí, declaró a última hora del sábado que el país tiene varias opciones para tomar represalias contra Irán, pero que aún no ha decidido qué medidas adoptará.
“Se están considerando varias opciones. Aún no se ha tomado una decisión al respecto”, declaró Saar al Canal 12 de televisión, al tiempo que reiteraba la postura del gobierno de que habría represalias.
Ante cualquier posible ataque, Irán renovó su promesa de responder a Israel y restó importancia a las perspectivas de un posible alto el fuego entre Hamás y Hezbolá -considerados ampliamente como apoderados de Irán- e Israel.
“Nuestra respuesta a cualquier agresión israelí será más dura y contundente, y ellos pueden ponernos a prueba si quieren”, declaró a la prensa en Damasco el ministro iraní de Asuntos Exteriores, Abbas Araghchi, tras entrevistarse con el presidente sirio, Bashar al-Assad. Se negó a dar detalles sobre cualquier intento de alto el fuego, añadiendo que “no es el momento” de entrar en esos detalles.
El riesgo de un conflicto más amplio en la región se ha disparado desde que Israel intensificó sus ataques contra Hezbolá en las últimas semanas, detonando localizadores y walkie talkies, atacando a los comandantes del grupo militante y enviando tropas al sur del Líbano por primera vez desde la guerra de 2006. El ataque del sábado golpeó por primera vez un campo de refugiados palestinos en el norte de Líbano, informó Associated Press, y dos altos cargos de Hamás murieron en Líbano.
Hamás y Hezbolá, ambos respaldados por Irán, son considerados por Estados Unidos grupos terroristas.
Mientras tanto, los aliados occidentales se han apresurado a dar forma a la respuesta de Israel a la descarga de misiles iraníes de esta semana. El presidente estadounidense, Joe Biden, reconoció el viernes que Israel respondería de algún modo, al tiempo que intentó disuadir al primer ministro Benjamin Netanyahu de un ataque contra las instalaciones petrolíferas iraníes. El presidente estadounidense había dicho anteriormente que Israel tampoco debería atacar las instalaciones nucleares iraníes.
Los ataques de las últimas semanas han acabado con gran parte del mando de Hezbolá, incluido su líder, Hassan Nasrallah. Un ataque perpetrado a última hora del jueves en los suburbios de Beirut tenía como objetivo al posible sucesor de Nasralá, Hashem Safieddine. Aunque ni el grupo militante ni el ejército israelí han confirmado si había muerto, Safieddine ha estado fuera de contacto desde el viernes, informó Reuters el sábado, citando fuentes de seguridad libanesas.
El Ministerio de Sanidad libanés dijo que 25 personas murieron y 127 resultaron heridas en ataques aéreos israelíes el viernes, informó la Agencia Nacional de Noticias estatal.
“Debemos seguir ejerciendo presión sobre Hezbolá y causar daños adicionales y continuos al enemigo, sin concesiones y sin respiro para la organización”, declaró el sábado el jefe del Estado Mayor de las FDI, Herzi Halevi, en un comunicado publicado en Telegram.
Israel dijo que sus acciones en el Líbano son necesarias para poner fin a un año de ataques transfronterizos con cohetes por parte de Hezbolá, que emprendió la campaña en respuesta a la guerra de Israel contra Hamás tras el ataque del 7 de octubre de 2023. Antes de que se cumpla un año del inicio del conflicto, las Fuerzas de Defensa de Israel advirtieron el sábado a los palestinos de que evacuaran el estratégico corredor de Netzarim, en el centro de Gaza, informó AP.
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