El Vaticano publica primera foto del papa Francisco tras un mes en el hospital Gemelli

El sumo pontífice cumplió un mes hospitalizado el viernes pasado, pero su estado de salud continúa mejorando.

Primera foto del papa Francisco desde su hospitalización. Foto: Oficina de Prensa de la Santa Sede
16 de marzo, 2025 | 03:35 PM

Bloomberg Línea — El Vaticano publicó la primera foto del papa Francisco desde que fue internado en el Hospital Universitario Agustino Gemelli, en Roma, el pasado 14 de febrero.

“Esta mañana, el papa Francisco concelebró la santa misa en la capilla del apartamento del décimo piso del Policlínico Gemelli”, escribió la oficina de prensa del Vaticano. Y en la imagen se le ve de espalda sentado en una silla de ruedas, con una túnica blanca y un chal morado.

PUBLICIDAD

Leer más: El papa Francisco no ha renunciado: le explicamos por qué hay una carta firmada

En la capilla a la que asistió el sumo pontífice este domingo se ha estado celebrando una misa diaria por su salud, decretada por la dirección del centro médico tras la primera de cuatro crisis que padeció.

El líder de los católicos fue hospitalizado debido a una bronquitis, y mientras estuvo internado se le diagnosticó una neumonía bilateral, así como una falla renal inicial leve, patologías de las cuales se ha estado recuperando.

“Las condiciones clínicas del Santo Padre permanecen estables, confirmando los progresos mostrados en la última semana. La oxigenoterapia de alto flujo continúa, reduciendo gradualmente la necesidad de ventilación mecánica no invasiva por la noche”, informó el Vaticano sobre el papa sábado, un día antes de publicar su foto.

Leer más: El delicado arte de hacer campaña para ser papa

Pese a la “mejoría gradual” en la salud del papa, evidenciada en exámenes de sangre y radiografías, “aún requiere terapia médica hospitalaria”, agregó la Santa Sede.

Pero Francisco también habló de su condición clínica este sábado, en un mensaje dirigido a los seguidores católicos en X, donde escribió: “Nuestro físico está débil, pero, incluso así, nada puede impedirnos amar, rezar, entregarnos, estar los unos para los otros, en la fe, señales luminosas de esperanza”.