Bloomberg — Jeff Bezos ha echado por tierra la afirmación de Elon Musk de que el fundador de Amazon.com Inc. (AMZN) dijo a “todo el mundo” que Donald Trump perdería las elecciones estadounidenses y que deberían vender sus acciones de SpaceX y Tesla Inc. (TSLA).
“Nop. 100% no es cierto”, dijo Bezos en una rara publicación el jueves en X, la plataforma de medios sociales de la que Musk es propietario. Musk pareció entonces dar marcha atrás. “Bueno, entonces, me corrijo”, respondió el jueves el CEO de Tesla y SpaceX, añadiendo un emoji de risa.
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Es el último tire y afloje entre las dos personas más ricas del mundo, cuyos negocios compiten en la industria espacial comercial.
Musk es propietario de SpaceX, que domina la industria del lanzamiento de cohetes y opera el servicio de internet por satélite Starlink. Bezos fundó la empresa de turismo y exploración espacial Blue Origin y es presidente ejecutivo de Amazon, que está construyendo una red de satélites rival llamada Proyecto Kuiper, aunque ambos empeños han quedado muy por detrás del de Musk. Amazon es también el mayor accionista de Rivian Automotive Inc, rival de Tesla.
El intercambio público se produce en un momento en el que Musk, que gastó más de US$130 millones en Trump y en los republicanos de abajo en las competitivas elecciones a la Cámara de Representantes, disfruta de un papel destacado en el círculo íntimo de Trump. Las acciones de Tesla han subido más de un 30% desde las elecciones del 5 de noviembre, ayudando a que el patrimonio neto de Musk se dispare a más de US$340.000 millones, según el Índice de Multimillonarios de Bloomberg.
La publicación inicial de Musk a última hora de la noche a sus más de 200 millones de seguidores subrayó sus estrechos vínculos con Trump, diciendo que se enteró de los chismes de Bezos en la finca Mar-a-Lago de Trump.
Musk y Bezos ya se han enfrentado anteriormente. En 2021, Blue Origin demandó a la NASA por conceder US$2.900 millones a SpaceX para desarrollar un módulo de aterrizaje lunar. Los dos hombres se han enfrentado ante los reguladores estadounidenses por los bienes inmuebles celestes para sus flotas de satélites.
- Con la colaboración de Kara Carlson.
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