Bloomberg — El Banco Central Europeo (BCE) debe reflexionar a fondo sobre cómo afrontar los riesgos y la incertidumbre en una era de inflación más volátil y menos claridad sobre la transmisión de la política monetaria, dijo su presidenta, Christine Lagarde.
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"Debemos reflexionar sobre cómo nuestro marco de política incorpora las evaluaciones de riesgo", dijo el viernes en un discurso en el Fondo Monetario Internacional en Washington, refiriéndose a la revisión en curso de la estrategia de política del BCE.
Este ejercicio "brinda la oportunidad de considerar cómo equilibrar la información de las previsiones de referencia con la información en tiempo real, cómo hacer el mejor uso posible de los escenarios alternativos y la importancia de la orientación a medio plazo ante distintos tipos de perturbaciones", dijo.
El BCE quiere presentar los resultados de la revisión, que sigue a la que finalizó en 2021, en la segunda mitad de 2025. Aunque esta vez será menos amplia y el objetivo simétrico de inflación del 2% no está en discusión, aún podría tener implicaciones significativas.
Isabel Schnabel, miembro del Comité Ejecutivo, ya dijo en abril que el BCE debería considerar la posibilidad de replantearse su forma de prever la expansión económica y la inflación para mejorar la comunicación y responder con rapidez a las perturbaciones, advirtiendo de que puede ser arriesgado confiar en una política de publicación exclusiva de proyecciones de referencia.
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En su conferencia, Lagarde dijo que la pandemia, la guerra de Ucrania y la crisis energética "han cambiado la estructura de la economía y planteado un reto a la forma en que evaluamos el impacto de la política monetaria". En el futuro se esperan más choques por el lado de la oferta.
Lagarde también destacó los efectos de la fragmentación global y la digitalización en la transmisión monetaria, aunque reafirmó que la revisión del BCE no discutirá el objetivo del 2%.
"Si entramos en una era en la que la inflación es más volátil y la transmisión de la política monetaria más incierta, será esencial mantener este profundo anclaje para la formación de precios", afirmó.
Pero el BCE debe "reducir en la medida de lo posible la incertidumbre creada por estos cambios estructurales", dijo Lagarde. "Como la incertidumbre seguirá siendo, no obstante, elevada, debemos gestionarla mejor".
--Con la colaboración de Bastian Benrath-Wright.
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