Bloomberg Línea — El régimen nicaragüense fracasó el miércoles en su nuevo intento de imponer a su candidato Valdrack Jaentschke al frente del Sistema de Integración Centroamericana (SICA), cuyo cargo de secretario general está vacante desde el 16 de noviembre de 2023, tras la renuncia de Werner Vargas Torres.
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Por derecho y orden institucional del Sistema, el asiento del SICA le corresponde a Nicaragua para el período 2022-2026. En los últimos 10 meses, el sandinismo ha propuesto sin éxito a tres candidatos, incluyendo a Violeta Irías Nelson, actual delegada en la Procuraduría de Derechos Humanos en la Región Autónoma del Caribe Norte, e Iris Marina Montenegro, diputada por el Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN).
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Nicaragua dijo que el encuentro de cancilleres para decidir las propuestas “concluyó sin consenso por las consultas que todavía realizan Gobiernos de nuestra región”.
Aunque Nicaragua contó con el apoyo de Honduras —pese a que canciller hondureño Eduardo Enrique Reina había dicho lo contrario días atrás— los representantes de Costa Rica, Guatemala y República Dominicana votaron en contra de la propuesta, El Salvador y Panamá se abstuvieron.
El gobierno que preside Daniel Ortega aseguró a los Miembros del Sistema “que cada día que transcurre sin Secretaría General, el SICA se debilita más y más, y cada país y cada Gobierno van buscando, como es lógico, mecanismos alternativos para realizar, unilateralmente, sus gestiones propias”.
Al respecto, en su comunicación diaria a medios afines, la vicepresidenta y vocera del gobierno nicaragüense, Rosario Murillo, dijo el miércoles que propondrán realizar nuevos encuentros “para alcanzar la cada vez más necesaria decisión, que no puede seguirse postergando, a menos que Centroamérica decida prescindir de este Sistema, en vez de robustecerlo”, mientras leía el comunicado que emitió su Cancillería.
¿Un candidato independiente?
El SICA, fue creado en diciembre de 1991 por Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua y Panamá, para alcanzar la integración de Centroamérica y constituirla en una región de paz, libertad, democracia y desarrollo. Luego se adhirieron Belice y República Dominicana como Miembros Plenos.
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De acuerdo con las atribuciones, el secretario general es el principal representante del organismo en el ámbito internacional y se caracteriza por ser una persona de reconocida vocación integracionista, con alto grado de imparcialidad, independencia de criterio e integridad.
Sin embargo, la oposición rechaza a Jaentschke, quien es ministro asesor para políticas y asuntos internacionales de Nicaragua, al identificarlo como un operador político leal al gobierno sandinista, quien buscaría alinear a la región con el bloque ruso-chino e impulsar su amistad con Vladimir Putin y Xi Jinping.
Para la Plataforma de Unidad por la Democracia (PUDE), integrada por organizaciones sociales y políticas en el exilio, la derrota de la candidatura nicaragüense “representa un triunfo significativo para la democracia en Centroamérica”, al evitar que el SICA “caiga en manos de un representante del régimen de Ortega, lo cual habría significado un retroceso considerable para la integración regional”.
También, la Concentración Democrática Nicaragüense (CDN-Monteverde), a través de una carta enviada a la ministra de Relaciones Exteriores de El Salvador, Alexandra Hill Tinoco, advirtió que “otorgar el cargo a un representante del régimen de Nicaragua pondría en riesgo la seguridad de la región centroamericana, al involucrarla en un conflicto global”, al tiempo que pidió “elegir un candidato que, en lugar de pretender obediencia política a intereses particulares y extrarregionales, sea un técnico que posea las calificaciones que vayan en línea con los principios de libertad, democracia y derechos humanos”.
En tanto, World Liberty Congress advirtió en X que “votar por Valdrack Jaentschke es votar por la represión y la censura” y recordó que el funcionario justificó la violenta represión en Nicaragua con más de 198 muertos, en los primeros 98 días de la crisis desatada en abril de 2018, incluidos estudiantes, y dijo que “hemos logrado restablecer la paz”. “Su versión de la ‘paz’ se basa en el silenciamiento, la represión y la negación de la existencia de presos políticos en Nicaragua. ¿Es este el líder que queremos para Centroamérica?”.
El académico y activista político Félix Maradiaga dijo que la permanencia de Nicaragua en el SICA “es legalmente cuestionable” debido a su retiro de la Organización de los Estados Americanos (OEA), consumado en 2023. “Los documentos fundacionales del SICA establecen claramente que la membresía está vinculada a la adhesión a los principios de la OEA. Esto plantea un desafío adicional con respecto a la participación de Nicaragua y subraya la necesidad de una vigilancia continua de los compromisos democráticos en la región”.
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