Bloomberg Línea — Un grupo de abogados argentinos solicitó que se tome declaración indagatoria y orden de captura internacional contra el presidente nicaragüense Daniel Ortega y su esposa, la vicepresidenta Rosario Murillo, al acusarlos de crímenes de lesa humanidad, en el marco de una investigación en curso.
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En la red social X, el profesor de derechos humanos y derecho penal internacional, Darío Richarte, quien ha impulsado el proceso penal internacional, anunció que la petición de la detención internacional también incluye a otros responsables de las violaciones a los derechos humanos en Nicaragua.
Por más de dos años, el equipo legal de Richarte ha investigado los crímenes de lesa humanidad denunciados en Nicaragua desde abril 2018, cuando estalló la crisis que dejó a más de 300 personas muertas por la represión armada contra las protestas civiles, según organismos internacionales.
En declaraciones a Infobae, Richarte dijo que “la solicitud se funda en la gravedad de las imputaciones, que incluyen asesinatos, torturas, desapariciones forzadas, detenciones arbitrarias y persecución por motivos políticos y religiosos, entre otros crímenes”.
El abogado agregó que tras meses de análisis de pruebas acumuladas, coincidieron que “existe suficiente evidencia para justificar el pedido de declaración indagatoria de los imputados. Además, solicitamos la detención y que se libre orden de captura internacional contra ellos”.
De acuerdo con Richarte, con esta petición, el Estado argentino tendrá la obligación de actuar conforme a sus compromisos internacionales y a las leyes nacionales en la materia.
El director de IHR Legal, Paulo Abrāo, explicó en X que la decisión estará en las manos del juez del caso de jurisdicción universal que tramita en Argentina.
Para el diplomático y periodista nicaragüense Arturo McFields Yescas, quien se encuentra exiliado, “este es un día histórico que marca el principio del fin de una larga lista de abusos de la dictadura de Nicaragua. Hay luz al final del túnel y habrá justicia para el pueblo nicaragüense y sobre todo, libertad”.
La Justicia argentina ya ha investigado otras denuncias por delitos de lesa humanidad fuera del país, como la persecución a los practicantes de la disciplina “Falun Gong” en China, los crímenes del Franquismo en España, y el genocidio denunciado por el pueblo Rohingya en Myanmar.
Petro a Ortega: “Al menos no arrastro los DD.HH. del pueblo”
En tanto, el régimen nicaragüense sigue aislando a su país, luego que el lunes Ortega asegurara en una cumbre virtual con jefes de Estado de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) que al presidente de Colombia, Gustavo Petro lo ve compitiendo con el presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva “en ver quién va a ser el líder que va a representar a los yankis en América Latina”.
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“Así lo veo a Petro, pero el pobre Petro no tiene la fuerza que tiene lógicamente Brasil”, dijo el líder sandinista, quien criticó a sus colegas por no reconocer la reelección de Nicolás Maduro, en las cuestionadas elecciones presidenciales del pasado 28 de julio en Venezuela.
En respuesta, Petro dijo que “al menos” su Gobierno no arrastra “los derechos humanos del pueblo” como sí lo hace el de Ortega. “Nos ha llamado (al presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, y a Petro) ‘arrastrados’ Daniel Ortega, solo porque queremos una solución negociada pacífica y democrática en Venezuela”, dijo en X.
Petro agregó “tal insulto me permito contestarle: Al menos no arrastro los derechos humanos del pueblo de mi país y menos los de mis compañeros de armas y de lucha contra las dictaduras”.
A principios de agosto, Brasil decidió expulsar a la embajadora de Nicaragua en el país sudamericano, Fulvia Patricia Castro, en reciprocidad a la expulsión del embajador brasileño en Nicaragua, Breno Souza da Costa, después de que el diplomático no asistiera a la conmemoración del aniversario 45 de la revolución sandinista.