Bloomberg — Los analistas de Brasil elevaron sus previsiones de tasas de interés para finales de 2026, ya que los banqueros centrales afirman que tienen todas las opciones políticas sobre la mesa para domar una inflación por encima del objetivo.
La Selic de referencia alcanzará el 9,5% en diciembre de 2026, por encima de la estimación anterior del 9%, según una encuesta semanal del banco central publicada este lunes 26 de agosto de 2024. Los analistas mantuvieron sin cambios sus estimaciones para finales de 2024, en el 10,5%, y para finales de 2025, en el 10%.
El gobernador del banco central, Roberto Campos Neto, declaró el sábado que la rigidez del mercado laboral está haciendo que la lucha de Brasil contra los precios al consumo sea más lenta de lo esperado y que el proceso de desinflación local se está “estancando”. Los responsables políticos han mantenido estables los costes de endeudamiento en el 10,5% desde junio, cuando interrumpieron un ciclo de flexibilización de casi un año. Los operadores apuestan a que el banco subirá las tasas tan pronto como el mes que viene.
El aumento de los costos de los servicios, unas estimaciones de los precios al consumo por encima del objetivo y una divisa más débil están añadiendo presión al alza a la inflación, según escribieron los banqueros centrales en las actas de su última reunión sobre política monetaria publicadas el 6 de agosto, añadiendo que el escenario exige “aún más cautela”. En discursos recientes, los responsables políticos han reiterado que siguen dependiendo de los datos, con todas las opciones de tasas sobre la mesa.
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El presidente Luiz Inácio Lula da Silva podría nombrar pronto un sustituto para Campos Neto, cuyo mandato finaliza en diciembre. El director de Política Monetaria del Banco Central, Gabriel Galipolo, a quien muchos ven como el elegido de Lula para dirigir la autoridad monetaria, dijo en un acto celebrado más tarde el lunes que el banco central sigue dependiendo de los datos para su decisión sobre las tasas de septiembre y que todas las opciones están sobre la mesa.
La economía brasileña está mostrando resistencia, con un aumento de los ingresos, un mercado laboral ajustado y estimaciones de crecimiento que han sido sistemáticamente revisadas al alza, dijo Galipolo. Al mismo tiempo, las expectativas de inflación siguen sin estar ancladas.
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Según la encuesta, los analistas prevén un aumento de los precios al consumo del 4,25% en diciembre, frente a la estimación anterior del 4,22%. Las estimaciones de inflación para 2026 y 2027, ambas consideradas como un indicador de la credibilidad del banco central entre los inversores, se mantienen por encima del objetivo del 3%.
En un horizonte de 12 meses, similar al actual régimen de inflación del banco, se prevé que los precios al consumo suban un 3,83%.
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