Bloomberg — Las ventas de viviendas usadas en Estados Unidos aumentaron en julio por primera vez en cinco meses, lo que sugiere que el mercado inmobiliario está a punto de estabilizarse a medida que disminuyen las tasas hipotecarias.
Los cierres de contratos subieron un 1,3% respecto del mes anterior a una tasa anualizada de 3,95 millones, según las cifras publicadas este jueves por la Asociación Nacional de Agentes Inmobiliarios (NAR, por sus siglas en inglés). El ritmo, el más débil para cualquier mes de julio desde 2010, estuvo en línea con la previsión mediana de una encuesta de Bloomberg a economistas.
“A pesar de la modesta ganancia, las ventas de viviendas siguen siendo lentas”, dijo el economista jefe de la NAR, Lawrence Yun, en una comunicado preparada. “Pero los consumidores definitivamente están viendo más opciones y la asequibilidad está mejorando debido a las tasas de interés más bajas”.
El mercado inmobiliario residencial se debilitó considerablemente después de que la Reserva Federal comenzara a subir las tasas de interés a principios de 2022. Una combinación de costos elevados y oferta limitada está impulsando el malestar del mercado. El aumento de costos de endeudamiento provocó una reducción en la cantidad de propiedades en venta que provocó un aumento en los precios de venta.
Si bien los potenciales compradores de viviendas están actualmente esperando los esperados recortes de tasas por parte de la Fed, la asequibilidad puede tardar en mejorar debido a los altos precios de las viviendas.
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El informe de la NAR mostró que el precio de venta promedio aumentaron en julio un 4,2% con respecto al año anterior, hasta los US$422.600. Se trata de un récord para cualquier mes de julio según los datos de la NAR.
Mientras que el inventario de viviendas disponibles aumentó ligeramente en julio hasta 1,33 millones, sigue estando muy por debajo de los niveles previos a la pandemia, de más de 1,9 millones. Eso representa una oferta de 4 meses al ritmo actual de ventas.
Yun dijo en una llamada con periodistas que un aumento interanual de casi el 20% en el inventario indica que algunos propietarios están dispuestos a renunciar a sus hipotecas del 3% y poner en venta sus propiedades.
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