Comprar ropa de segunda mano entró al ADN de los consumidores latinoamericanos

La demanda de ropa de segunda mano se debe a su mayor calidad y rentabilidad, según los expertos. Los vendedores de Colombia y México han facturado alrededor de US$26 millones en los últimos siete años

A woman sews, right, at a used clothing stall at a market in the Prado neighborhood of Medellin, Colombia, on Wednesday, July 30, 2014. The Andean nation's economy expanded 6.4 percent in the first quarter, its fastest pace in more than two years and is forecast in a Bloomberg survey to grow 4.8 percent this year, up from 4.7 percent in 2013. Photographer: Mariana Greif Etchebehere/Bloomberg
17 de agosto, 2024 | 09:00 AM

Bloomberg Línea — Sea por consideración con el ambiente, por entrar a la economía circular o simplemente por mejorar las finanzas personales, los compradores de la ropa de segunda mano están creciendo en el mundo, y América Latina sigue los pasos.

El mercado de ropa de segunda mano se valoró en US$91.120 millones en 2022, y se estima que puede alcanzar los US$284.870 millones para 2030, con una tasa de crecimiento compuesta anual del 15,4% entre 2023 y 2030, de acuerdo con la firma Kings Research.

La expansión de este mercado seguirá en la medida en que más personas tomen conciencia sobre las ventajas financieras, sociales y ambientales de este tipo de compras, en una industria en la que “la ropa vintage se está volviendo cada vez más popular en varias plataformas y se está desarrollando una gran demanda de ropa de segunda mano”, de acuerdo con Future Market Insights.

PUBLICIDAD

¿Cómo funciona el mercado de segunda mano en América Latina?

La participación de América Latina en este mercado está teniendo un crecimiento exponencial. Dividiendo la región entre América del Norte y Sudamérica, el Norte tiene un crecimiento exponencial de 8x, mientras que el Sur tiene un crecimiento de 4x, de acuerdo con cifras compartidas por Cecilia Ollero, country manager de GoTrendier México, una plataforma de moda de segunda mano, a Bloomberg Línea.

“En 2016, esta moda vendía en recommerce (comercio de segunda mano) 4.500 prendas y ya registra más de 4 millones. La forma de participar en ella es como comprador y como vendedor. En la segunda modalidad, México en 2016 registraba una participación de poco más de 71.000 vendedores y hoy esa cifra ha crecido 36 veces para dicho país (2,5 millones). En Colombia, en 2017 había poco más de 1.300 vendedoras y ya creció esa cifra 33 veces (42.900)”, destacó Ollero.

Las transacciones de esta plataforma son alrededor de 120.000 mensuales, con un ticket promedio de US$23,32 en cada transacción. Los usuarios en América Latina y el Caribe ascienden a las 662 millones de personas.

PUBLICIDAD

Ver más: ¿Por qué es tan difícil controlar las emisiones de la industria de la moda?

Para Ollero, establecer los valores de mercado y la participación de los diferentes países de la región en la compraventa de moda de segunda mano, debe contemplar tanto parte física como digital. “Mirando ambos mercados, los países de Latinoamérica que más consumen moda de segunda mano son México y Brasil (...) En el tema digital, las ventas representaron para los usuarios en México, sólo en 2023, más de US$19 millones, y para Colombia, más de US$7 millones”, añadió.

Sin embargo, la compra de segunda mano apenas se está sumergiendo en el ADN de los consumidores latinos. Cifras de CHEP, una empresa de Brambles, sobre economía circular, mostraron en un informe del año anterior que en la región, un 60% de las personas consume ropa nueva.

Brasil, según el texto, es el mercado más frecuente en la compra de ropa de segunda mano (77%), significativamente más que en Colombia (22%) y Perú (32%).

“Latinoamérica aún está quitando los mitos que rodean a la industria del reúso de prendas, artículos y zapatos. Aún hay personas que no lo ligan a una decisión financiera inteligente, sino a un signo de inestabilidad económica, hay otros que todavía se cuestionan el verdadero impacto que podría tener el reúso o hay quienes creen que las decisiones del medio ambiente sólo dependen de las empresas y no han tomado un rol activo más allá de ser un consumidor”, dijo Ollero.

El papel activo de los Millennials en el mercado de segunda mano

Las motivaciones de los Millennials, que son los que más compran este tipo de moda (33% vs. el 28% de la generación Z y el 26% de la GenX), están relacionadas tanto con decisiones de finanzas personales como ecológicas o contribuciones al medio ambiente.

“Hay que destacar que hacer de la razón de compra la sostenibilidad va en crecimiento. El 73% de las personas en todo el mundo cree que los problemas medioambientales son más importantes que antes, por ende buscan proactivamente servicios y productos de compra que respondan a esta atención al medio ambiente”, le respondió Ollante a Bloomberg Línea.

La country manager de GoTrendier en México fue clara al destacar que la forma en la que los Millennials adquieren moda en la actualidad se relaciona mucho con las compras digitales, la amplitud de ofertas que les permite navegar entre precios bajos, productos exclusivos, vintage, entre otras características.

PUBLICIDAD

Y resaltó también el aporte de la generación Z, que creció en la era digital y tiene menos barreras de información, “lo cual crea en ellos diferentes tendencias en su consumo, algunos buscarán siempre estar a la moda y otros preferirán lo contrario; sumado a esto, una mayor apertura que tienen a crear conciencia ante temas ambientales, ofertas como el reúso, reciclar o incluso renta de artículos de moda les es una gran opción”, finalizó.

Algunas cifras del negocio de GoTrendier:

  • La plataforma busca cerrar 2024 con 1,2 millones de usuarios nuevos entre Colombia y México.
  • En Colombia y México, de 2016 a 2023, fueron publicadas 32 millones de prendas en esta plataforma.
  • En Colombia, Medellín, Bogotá y Cali son las ciudades que más consumen moda de segunda mano. En México, son Ciudad de México, el Estado de México y Jalisco, las regiones con mayor consumo de este tipo.