La posible llegada de una recesión en Estados Unidos es uno de los mayores temores que tiene el mercado en este momento, por el impacto que podría tener tal situación en las cotizaciones de los activos financieros. En ese contexto, el CEO de UBS Group AG (UBS), Sergio Ermotti, aclaró que no le parece el escenario más probable, aunque no descartó una desaceleración.
Además, Ermotti dijo que es probable que veamos una mayor volatilidad del mercado en la segunda mitad del año, en parte a raíz a las elecciones estadounidenses del 5 de noviembre noviembre.
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¿Desacelera Estados Unidos?
Cuando se le preguntó cuáles son sus perspectivas para la economía estadounidense, Ermotti sostuvo: “No necesariamente una recesión, pero definitivamente una desaceleración es posible”. Las declaraciones fueron en diálogo con el medio audiovisual CNBC.
En ese sentido, el ejecutivo suizo añadió que “los indicadores macroeconómicos no son lo suficientemente claros como para hablar de recesión y, de hecho, probablemente sea prematuro”. En esa misma línea, continuó: “Lo que sabemos es que la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) tiene capacidad suficiente para intervenir y apoyar, aunque va a llevar tiempo que lo que hagan se transmita luego a la economía”.
UBS espera que la Reserva Federal recorte su tasa de interés al menos 50 puntos básicos este año. Por el momento, los operadores se dividen entre un recorte de 50 y 25 puntos básicos en la próxima reunión de la Fed en septiembre.
En cuanto a las posibilidades de tener un mercado más volátil, Ermotti subrayó: “Lo que hemos visto en las dos últimas semanas, en términos de volatilidad, desde mi punto de vista, es una clara señal de la fragilidad de algunos elementos del sistema, por lo que uno debería esperar definitivamente un mayor grado de volatilidad”.
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Inflación de Estados Unidos, en línea con lo esperado
Este miércoles se publicó el índice de precios al consumidor de Estados Unidos, que mostró que arrojó una tasa de inflación anual del 2,9% en julio de 2024. La última vez que la inflación estadounidense estuvo por debajo de 3% fue en marzo de 2021, cuando se ubicó en 2,6% y a partir de ahí comenzó su crecimiento gradual.
El dato fue consistente con un índice de inflación mensual de 0,2%, en línea con lo esperado por el mercado.
Asimismo, el llamado índice de precios al consumo subyacente -que excluye los costes de los alimentos y la energía- aumentó un 3,2% en julio respecto a hace un año, lo que sigue siendo el ritmo más lento desde principios de 2021. La medida mensual subió un 0,2%, un ligero repunte desde la lectura sorprendentemente baja de junio, según mostraron el miércoles las cifras de la Oficina de Estadísticas Laborales.
Los economistas consideran que el indicador subyacente es mejor indicador de la inflación que el IPC general. Esta medida también subió un 0,2% respecto al mes anterior y un 2,9% respecto al año anterior. BLS dijo que casi el 90% del avance mensual se debió a la vivienda, que se aceleró respecto a junio.