Bloomberg — Brasil terminará 2024 con un déficit fiscal primario de 28.800 millones de reales (US$5.200 millones), equivalente al 0,25% del Producto Interno Bruto, según las nuevas estimaciones del gobierno publicadas el lunes.
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Esa previsión sitúa el déficit primario, que excluye el pago de intereses, en el límite del rango de tolerancia establecido en el marco fiscal de la nación. El gobierno había previsto previamente un desfase de 14.500 millones de reales para este año.
El ministro de Finanzas de Brasil, Fernando Haddad, dijo el jueves pasado que el gobierno congelará 15.000 millones de reales en gastos del presupuesto de este año para cumplir con la banda de tolerancia que es vigilada de cerca por los inversores. La administración había intentado eliminar el déficit presupuestario primario en 2024, pero eso habría requerido congelar al menos el doble de la cantidad que congeló, según estimaciones de economistas de Itaú Unibanco SA (ITUB) y Banco Santander SA (SAN).
El secretario del Tesoro, Rogerio Ceron, dijo a la prensa que el gobierno de Brasil confía en que cumplirá su objetivo fiscal para 2024 y que hará lo necesario para lograrlo.
"Las preocupaciones son legítimas, y es nuestro papel reforzar que el camino de nuestro compromiso fiscal sigue siendo el mismo", dijo Ceron.
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La congelación del gasto debía anunciarse esta semana junto con el nuevo informe presupuestario, pero el gobierno decidió actuar con mayor rapidez para atajar las preocupaciones de los inversores sobre unos gastos que han provocado la venta de activos locales. Sin ese cambio en los gastos, la previsión de déficit para este año habría sido de 32.600 millones de reales, según el informe del lunes.
En declaraciones a los periodistas a primera hora del lunes, el presidente Luiz Inácio Lula da Silva dijo que la administración congelará los recursos presupuestarios siempre que sea necesario y que la responsabilidad fiscal es algo que siente “en las entrañas”.
Lula había puesto previamente en duda su compromiso con la meta fiscal, diciendo en una entrevista en la televisión local que "no está obligado a fijar una meta y atenerse a ella" si decide que "tiene cosas más importantes que hacer".
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