Bloomberg Línea — Donald Trump, víctima de un atentado durante un mitin político en Pensilvania el pasado 13 de julio, brindó detalles de lo sucedido y afirmó que “debería estar muerto”. Lo hizo en diálogo con The New York Times, el primer medio de comunicación al que brindó una entrevista tras el ataque.
Trump, que este lunes 15 de julio asistirá a la Convención del Partido Republicano, donde se oficializará su candidatura a las elecciones presidenciales de los Estados Unidos, afirmó que si el proyectil disparado por Thomas Matthew Crooks perforó su oreja derecha y no terminó con su vida, fue porque giró un poco a la derecha para observar una cartelera sobre migración.
“Se supone que debería estar muerto”, dijo el expresidente norteamericano, que se retiró del evento con la ayuda de agentes del Servicio Secreto, sangre en su rostro y un puño en alto, imagen alrededor de la cual seguramente girará su campaña política y que pasará a la historia, de acuerdo con algunos analistas.
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De hecho, el mismo Trump se refirió al impacto de la fotografía en la opinión pública: “Mucha gente dice que es la foto más icónica que han visto. Tienen razón y yo no morí. Normalmente tienes que morir para tener una foto icónica”.
El candidato republicano, que asistió con parte de su cabeza vendada para la entrevista con el medio de comunicación neoyorkino, dio a conocer qué dijo el médico que le prestó atención luego el atentado.
“El médico del hospital dijo que nunca había visto algo así, lo llamó un milagro”, afirmó.
Detalles del tiroteo contra Donald Trump
El atentado contra el expresidente Donald Trump fue perpetrado por un joven de 20 años llamado Thomas Matthew Crook, que le disparó con un rifle AR 556 a menos de 150 metros de distancia adquirido legalmente, como confirmó el FBI.
Crooks fue abatido por miembros del Servicio de Inteligencia instantes después de presionar el gatillo de su rifle contra Trump y en medio de un intercambio de disparos que dejó a dos heridos, además de un muerto, el bombero Corey Comperatore, que en medio del tiroteo se abalanzó sobre su familia para protegerla.
“Si bien la investigación hasta la fecha indica que el tirador actuó solo, el FBI continúa realizando una actividad de investigación lógica para determinar si hubo co-conspiradores asociados con este ataque. En este momento, no hay preocupaciones actuales de seguridad pública”, afirmó el FBI a través de un comunicado.
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El FBI agregó que no ha identificado lo que motivó a Crooks a disparar contra Donald Trump y que continúa revisando la evidencia para tener mayor claridad de lo ocurrido, entre ella, “el teléfono del tirador”.
Después del tiroteo, el presidente Joe Biden y rival de Trump en las elecciones del 5 de noviembre, pidió “bajar la temperatura” al debate político previo a los comicios y le envió un mensaje de solidaridad al candidato demócrata.
“Me han informado sobre el tiroteo en el mitin de Donald Trump en Pensilvania. Me alegro de saber que está a salvo y bien. Estoy orando por él y su familia y por todos los que estuvieron en la manifestación, mientras esperamos más información”, dijo desde el Despacho Oval de la Casa Blanca.
