Bloomberg — El llamamiento de Emmanuel Macron al pueblo francés para “escribir la historia” se hará realidad el domingo, cuando los votantes acudan a as urnas para la primera vuelta de las elecciones legislativas.
Pero puede que no sea la historia que el presidente francés esperaba.
En las tres semanas transcurridas desde que convocó la votación anticipada en lo que describió como un “acto de confianza”, el partido de extrema derecha Agrupación Nacional de su némesis, Marine Le Pen, ha construido una ventaja dominante en las encuestas. El grupo centrista de Macron se encuentra en tercer lugar, por detrás de una coalición de partidos de izquierda improvisada a toda prisa que incluye a socialistas, comunistas, verdes y el partido de extrema izquierda Francia Abierta.
El sorpresivo movimiento de Macron el 9 de junio se produjo tras un varapalo en las elecciones europeas a favor de la extrema derecha. Cogió desprevenidos a sus aliados y desató la agitación en los mercados por las posibles consecuencias de un gobierno de la Agrupación Nacional o de izquierdas sobre las finanzas públicas y las empresas de la segunda mayor economía de la zona euro. Los ciudadanos de todo el país analizaron el impacto de la votación en sus bolsillos y en cuestiones como la inmigración y la seguridad.
En un breve discurso televisado anunciando la votación anticipada, Macron dijo que "el ascenso de los nacionalistas, de los demagogos, es un peligro para nuestra nación, pero también para nuestra Europa, para el lugar de Francia en Europa y en el mundo".
Desde entonces, ha sido acusado de matar su alianza política centrista por su exprimer ministro y posible sucesor, Edouard Philippe, y de aplastar la democracia por el jefe republicano de centro-derecha del Senado, Gerard Larcher.
Le Pen ha atacado la gestión de la economía por parte del presidente, yendo al corazón de su intento de construir un legado como reformador. También ha apuntado a la forma en que su gobierno ha abordado cuestiones fundamentales para sus partidarios, como la inmigración y la seguridad. La coalición izquierdista Nuevo Frente Popular, por su parte, se ha presentado como la única fuerza política capaz de mantener alejada del poder a la Agrupación Nacional. En el frente económico, ha pedido un fuerte aumento del salario mínimo en Francia y mayores impuestos para los ricos.
Macron ha contraatacado advirtiendo de los peligros de los "extremos", diciendo que las agendas de los bloques de extrema derecha y extrema izquierda enfrentan a las personas entre sí y podrían conducir a una "guerra civil".
Mayoría absoluta
Las dificultades del presidente comenzaron cuando su partido perdió la mayoría absoluta en la Asamblea Nacional en la votación legislativa que siguió a su reelección para un segundo mandato de cinco años en 2022.
Su gobierno ha luchado por lograr el consenso en el parlamento para aprobar reformas clave. Su popularidad cayó en picado el año pasado cuando impulsó un impopular aumento de la edad de jubilación utilizando una herramienta constitucional para eludir una votación, a pesar de meses de protestas. Sin embargo, ha sobrevivido a mociones de censura con la ayuda de Los Republicanos, aunque ese partido se ha dividido ahora después de que su líder, Eric Ciotti, se aliara con Le Pen.
Macron afirma que disolver el parlamento y convocar una votación era la única forma de evitar un mayor desorden en otoño, cuando dijo que los partidos de la oposición planeaban forzar la salida de su gobierno durante la votación del presupuesto anual.
Aunque algunos de los 577 escaños de la cámara baja se decidirán el domingo, la mayoría irán probablemente a una segunda vuelta el 7 de julio. La votación a dos vueltas hace que las predicciones sobre los escaños sean complicadas, aunque las proyecciones de las empresas de sondeos muestran que la Agrupación Nacional y sus aliados van camino de convertirse en la formación más numerosa. El grupo de Le Pen necesitaría 289 legisladores para tener mayoría absoluta. Dos sondeos publicados el viernes, de Elabe y Odoxa, estimaban que obtendría 260-295 y 265-305 escaños respectivamente.
Un sondeo separado de LegiTrack OpinionWay-Vae Solis sobre intención de voto entre 1.058 personas mostró que varias docenas de candidatos de la Agrupación Nacional serán elegidos directamente en la primera vuelta, con unos 400 presentes en la segunda, en la que se espera que el número de desempates a tres llegue a 150-200, un récord.
Esta incertidumbre se reflejó al final de la semana, cuando los operadores se deshicieron de los activos franceses. El rendimiento de los bonos del Estado a 10 años subió a su nivel más alto desde noviembre, ampliando el diferencial sobre los títulos alemanes más seguros a 86 puntos básicos, el máximo desde 2012. El índice bursátil de referencia CAC 40 cayó por cuarto día consecutivo, dirigiéndose a su nivel más bajo desde enero.
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