Bloomberg — La construcción de nuevas viviendas en EE.UU. se desplomó en mayo al ritmo más lento de los últimos cuatro años, a medida que el aumento de las tasas de interés socavaba el impulso de la industria inmobiliaria de principios de año.
Las viviendas iniciadas disminuyeron un 5,5% hasta una tasa anualizada de 1.28 millones el mes pasado, según los datos del gobierno publicados el jueves. La cifra estuvo por debajo de todas las estimaciones, salvo una, de una encuesta de Bloomberg entre economistas.
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Los permisos de construcción, que apuntan a futuras construcciones, cayeron un 3,8% a una tasa anualizada de 1.39 millones, también la más débil desde junio de 2020. Los descensos en los inicios y los permisos fueron amplios en las unidades multifamiliares y unifamiliares. Los permisos autorizados para viviendas unifamiliares cayeron por cuarto mes consecutivo al ritmo más lento en un año.
La caída de la construcción de viviendas sugiere que la construcción residencial puede restar crecimiento económico tras haberse estabilizado a principios de año. Antes del informe, la previsión GDPNow del Banco de la Reserva Federal de Atlanta había calculado que esta categoría apenas contribuiría al producto interior bruto en el trimestre actual.
“Los inicios más débiles de la construcción de viviendas en EE.UU. desde los cierres provocados por la pandemia son una prueba bastante convincente de la política monetaria restrictiva”, afirmó en una nota Sal Guatieri, economista jefe de BMO Capital Markets. “Aunque el crecimiento de la población y de la mano de obra está proporcionando cierto apoyo, los constructores de viviendas de EE.UU. no estarán más ocupados hasta que caigan los costos de los préstamos”.
Los datos recientes que indican un enfriamiento de la inflación, así como del gasto de los consumidores, deberían dar más confianza a la Reserva Federal para empezar a recortar las tasas de interés, lo que hará bajar también las tasas hipotecarios. Aun así, EE.UU. sigue enfrentándose a una enorme escasez de viviendas, que mantiene los precios elevados y deja a muchos estadounidenses fuera del mercado de la vivienda en propiedad.
Los principales constructores de viviendas, como Lennar Corp. (LEN) y KB Home (KBH), han estado intentando compensar las elevadas tasas con generosos incentivos de venta, lo que ha ayudado a impulsar la demanda. Aun así, las empresas han sido capaces de mantener unos márgenes saludables, que los ejecutivos dicen que pueden subir más cuando un entorno de tasas más bajas les permita reducir las concesiones.
La construcción descendió en tres regiones, encabezada por una caída del 19% en el Medio Oeste. Aunque la actividad constructora repuntó en el Oeste, el ritmo sigue siendo más lento que el registrado durante gran parte del año pasado.
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Las terminaciones de viviendas también cayeron. El número de proyectos multifamiliares en construcción cayó al nivel más bajo desde septiembre de 2022, mientras que el de unidades unifamiliares fue el más débil de este año.
Los datos de construcción de viviendas son volátiles, y el informe del gobierno mostró un 90% de confianza en que el cambio mensual oscilara entre un descenso del 3,9% y un aumento del 14,9%.
Otros datos publicados este jueves mostraron que las solicitudes iniciales de prestaciones por desempleo en EE.UU. descendieron ligeramente la semana pasada desde el máximo de 10 meses alcanzado en el periodo anterior. Las solicitudes continuas, un indicador del número de personas que reciben prestaciones por desempleo, aumentaron por séptima semana consecutiva.
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