Bloomberg — El Distrito Escolar Unificado de Los Ángeles ha aprobado prohibir los teléfonos móviles durante toda la jornada escolar, argumentando que estos aparatos distraen a los niños de su aprendizaje, deterioran su salud mental y dificultan sus relaciones personales.
El distrito, que cuenta con 400.000 alumnos y es el segundo sistema escolar más grande del país, dijo que estudiará formas de aplicar el programa cuando entre en vigor en enero, incluida la posibilidad de obligar a los alumnos a guardar los móviles en fundas cerradas con llave o en armarios especiales.
En la resolución que se aprobó este martes se cita un compendio de estudios que destacan los efectos nocivos del uso de celulares por parte de los jóvenes, entre los que figuran encuestas de Common Sense Media que revelan que el 50% de los adolescentes declaran sentirse “adictos” a sus móviles y otra que señala que el 97% de los niños de 11 a 17 años usan sus aparatos durante la jornada escolar.
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“Los niños han perdido la posibilidad de ser simplemente niños”, señaló en un comunicado Nick Melvoin, uno de los miembros de la Junta Directiva que presentó la resolución.
Según la política vigente en Los Ángeles, se prohíbe a los alumnos utilizar sus teléfonos móviles durante las horas de clase, pero se les permite acceder a ellos durante el almuerzo o las pausas para comer.
Los administradores escolares de todo EE.UU. están lidiando con la forma de manejar el uso generalizado de teléfonos inteligentes por parte de los niños. Cerca del 70% de los profesores de secundaria afirman que la distracción de los alumnos con los móviles es un problema importante en sus aulas, según el Centro de Investigación Pew.
En Nueva York, la gobernadora Kathy Hochul dijo que también planea proponer una medida para prohibir los teléfonos inteligentes en las escuelas durante la sesión legislativa de 2025.
El gobernador de California, Gavin Newsom, afirmó el martes que colaborará con el poder legislativo para limitar el uso de los teléfonos inteligentes durante el horario escolar en todas las escuelas del estado. “Cuando los niños y los adolescentes están en la escuela, deberían estar centrados en sus estudios, no en sus pantallas”, afirmó en un comunicado.
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