Bloomberg — El fondo soberano noruego de US$1,7 billones dijo que votaría en contra del paquete salarial de US$56.000 millones para el CEO de Tesla Inc. (TSLA), Elon Musk, añadiendo a la oposición para el fabricante de automóviles antes de su asamblea general anual de la próxima semana.
“Seguimos preocupados por el tamaño total del premio, la estructura dados los desencadenantes de rendimiento, la dilución y la falta de mitigación del riesgo de persona clave”, dijo Norges Bank Investment Management - el nombre oficial del fondo - en un comunicado el sábado.
La votación en la Junta General de Accionistas de la próxima semana será la segunda vez que el paquete salarial de Musk se somete a los accionistas. Un juez anuló una votación inicial que aprobó el paquete en 2018. Los asesores de voto Institutional Shareholder Services y Glass Lewis & Co. han recomendado a los inversores que rechacen la propuesta.
NBIM también votó en contra del paquete salarial en 2018, aunque cerca de tres cuartas partes de los inversores lo respaldaron en aquel momento. Un juez de Delaware anuló el acuerdo a principios de este año, diciendo que los inversores no estaban plenamente informados de los detalles clave.
La decisión es “coherente con nuestro voto sobre el mismo premio en 2018″, dijo el fondo noruego, añadiendo que “seguirá buscando un diálogo constructivo con Tesla sobre este y otros temas.”
El resultado de la votación de los accionistas es sólo consultivo, aunque una pérdida sería una gran vergüenza para el consejo de Tesla y para su máximo ejecutivo. Musk también ha amenazado con fabricar productos fuera de Tesla si no puede aumentar su participación en la empresa, algo que el acuerdo salarial le permitiría hacer.
Aunque NBIM dijo que votaría a favor de una propuesta de la dirección para trasladar el domicilio social de la empresa de Delaware a Texas, tiene previsto respaldar una propuesta de los accionistas que pide a Tesla que adopte nuevas políticas relacionadas con la negociación colectiva y la libertad sindical.
Esta última propuesta, una respuesta a una huelga de casi siete meses de duración de los técnicos suecos de Tesla, cuenta con el apoyo de varios de los mayores propietarios de activos de la región nórdica. Tesla ha instado a los accionistas a votar en contra, afirmando que “la empresa ya está comprometida con la protección de los derechos de sus empleados”.
NBIM poseía una participación del 0,98% en Tesla por valor de US$7.720 millones a finales de 2023, según su página web. Emite sus intenciones de voto cinco días antes de las juntas generales de las empresas en las que invierte.
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