Bloomberg — China devolvió el golpe al Grupo de los Siete (G-7) por sus críticas a las prácticas comerciales globales de Pekín, acusando a los miembros de exagerar la amenaza del exceso de capacidad que supone la segunda mayor economía del mundo.
El club de ministros de Finanzas y autoridades de los bancos centrales de los países más ricos del mundo acusó el sábado a China en un comunicado de perjudicar a las economías de sus socios comerciales mediante su “uso exhaustivo de políticas y prácticas ajenas al mercado”, y añadió que los miembros seguirían vigilando los “impactos negativos del exceso de capacidad”.
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La portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino, Mao Ning, rechazó tales afirmaciones durante una rueda de prensa regular celebrada este lunes en Pekín. “El G-7 exagera el llamado exceso de capacidad de China e intenta poner obstáculos y limitaciones al progreso de China”, dijo.
“Es esencialmente proteccionismo”, señaló. “No beneficia a ninguna de las partes”.
La disputa es la última muestra de las crecientes tensiones entre China y las naciones industrializadas del mundo.
El gobierno de Biden anunció el viernes que volverá a imponer aranceles a cientos de productos importados de China y ha pasado a cuadruplicar los aranceles estadounidenses sobre los vehículos eléctricos chinos. La Unión Europea (UE) inició el año pasado una investigación sobre la industria china de vehículos eléctricos y está a punto de tomar una decisión sobre el aumento de los gravámenes.
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China, por su parte, ha señalado que está dispuesta a desatar aranceles de hasta el 25% sobre los vehículos importados con motores grandes.
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