Bloomberg — Los consumidores estadounidenses moderaron sus expectativas de inflación en la segunda quincena de mayo respecto a principios de mes, aunque los elevados precios siguieron pesando en el ánimo.
Los consumidores esperan que los precios suban a un ritmo anual del 3,3% durante el próximo año, por debajo del 3,5% previsto a principios de mes, según mostraron el viernes los datos de la Universidad de Michigan. En abril, los encuestados esperaban una inflación anual del 3,2%.
Los costes aumentarán un 3% en los próximos cinco a diez años, lo que también supone una rebaja con respecto a principios de mes y coincide con las expectativas de abril.
Parte de la mejora puede deberse a una disminución constante de los precios de la gasolina a lo largo del mes.
Aunque el índice final de confianza de los consumidores de mayo de la universidad mejoró con respecto a la lectura preliminar, sigue registrando un notable descenso de 8,1 puntos con respecto a abril y se sitúa en su nivel más bajo en seis meses, 69,1.
La estimación media de una encuesta de Bloomberg entre economistas apuntaba a un aumento del indicador desde su lectura preliminar de 67,4.
“Aunque los consumidores reconocen que la inflación real ha disminuido sustancialmente desde 2022, una parte considerable de ellos sigue expresando la carga que los altos precios ejercen sobre sus vidas”, declaró Joanne Hsu, directora de la encuesta.
Además de los elevados precios y los costes de los préstamos, que aumentan la preocupación por el coste de la vida, los encuestados están cada vez más preocupados por el mercado laboral. Esperan que aumente la tasa de desempleo y se ralentice el crecimiento de los ingresos. Esto supone un reto para el Presidente Joe Biden en su intento de reelección.
Aproximadamente cuatro de cada diez encuestados culparon a los altos precios de la erosión del nivel de vida. Los consumidores también ven menos posibilidades de que la Reserva Federal baje las tasas de interés el año que viene. Solo 1 de cada 4 encuestados ve ahora una bajada de tasas, frente al 37% de enero.
El indicador de las condiciones actuales descendió a 69,6 en mayo, frente a 79 en los meses anteriores. El indicador de expectativas cayó de 76 a 68,8 puntos.
Las condiciones de compra de bienes duraderos cayeron a su nivel más bajo en un año, mientras que la percepción de los consumidores sobre su situación financiera actual fue la peor en cinco meses.
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