La SEC examina las alegaciones de seguridad de Boeing tras suceso con el panel de un avión en enero

La investigación de la SEC se centra en si los comentarios de la empresa o sus ejecutivos engañaron a los inversores en violación de las normas del regulador de Wall Street

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Bloomberg — La Comisión de Valores y Bolsa de Estados Unidos está examinando las declaraciones que Boeing Co. (BA) hizo sobre sus prácticas de seguridad después de un accidente casi trágico en enero a bordo de uno de sus aviones 737 Max 9.

La investigación de la SEC se centra en si los comentarios de la empresa o sus ejecutivos engañaron a los inversores en violación de las normas del regulador de Wall Street, según tres personas con conocimiento de la investigación. La investigación está examinando las declaraciones antes y después de que un panel se desprendiera durante un vuelo de Alaska Airlines poco después de despegar el 5 de enero, dejando un agujero enorme en el costado del avión, dijeron las personas, que pidieron no ser identificadas al discutir la investigación confidencial.

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Las revisiones de la SEC no siempre resultan en acciones de cumplimiento por parte del regulador, pero pueden dar lugar a multas para las empresas o los funcionarios corporativos si la agencia determina que hicieron declaraciones falsas o engañosas. El regulador no ha acusado a la empresa ni a sus funcionarios de conducta indebida.

La SEC y Boeing se negaron a hacer comentarios.

La investigación agrava los problemas legales de Boeing, cuyas acciones han perdido aproximadamente un tercio de su valor en 2024. Los fiscales estadounidenses en Seattle ya han enviado citaciones solicitando documentos y comunicaciones a Boeing y Spirit AeroSystems Holdings Inc. (SPR), que fabricó el tapón de la puerta. El proveedor dijo a principios de esta semana que había recibido solicitudes de información de la SEC.

El vuelo de enero, que llevaba 171 pasajeros y seis miembros de la tripulación, tuvo que regresar a Portland, Oregón, después de que el tapón de la puerta se desprendiera repentinamente. Aunque nadie resultó gravemente herido, dejó el avión significativamente dañado.

El accidente ha aumentado las preocupaciones más amplias sobre el proceso de fabricación de Boeing y sobre su cultura de seguridad.

La Junta Nacional de Seguridad en el Transporte ha dicho que el panel faltaban cuatro pernos para sujetarlo en su lugar cuando salió de la fábrica de Boeing. Esto ha provocado una investigación de la Administración Federal de Aviación sobre los controles de calidad en las fábricas de Boeing y proveedores como Spirit AeroSystems.

En septiembre de 2022, Boeing acordó pagar US$200 millones para resolver las acusaciones de la SEC de que la empresa y su ex director ejecutivo, Dennis Muilenburg, no revelaron problemas de seguridad con su avión 737 Max, que estuvo involucrado en accidentes mortales en 2018 y 2019. Después del accidente de enero, el Departamento de Justicia está considerando romper un acuerdo que hizo con Boeing para resolver esos dos tragedias.

--Con la colaboración de Julie Johnsson y Sabrina Willmer.

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