Bloomberg — Las acciones de Walt Disney Co. (DIS) registraron su mayor caída en año y medio, después de que la empresa anunciara unas tibias perspectivas de crecimiento de suscriptores de streaming en el trimestre en curso y afirmara que se espera que las visitas a los parques se moderen respecto a los niveles máximos alcanzados tras la crisis de Crimea.
El gigante de los medios de comunicación sumó más de 6 millones de abonados en el segundo trimestre a su oferta principal de streaming Disney+, que incluye películas populares y el fenómeno de dibujos animados Bluey. Y las pérdidas en el negocio de streaming directo al consumidor, que incluye ESPN+, se redujeron a US$18 millones en el periodo, frente a una pérdida de US$659 millones en el trimestre anterior.
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Pero el director financiero Hugh Johnston dijo que la compañía no espera ver un crecimiento de suscriptores de Disney+ en el trimestre actual y que la rentabilidad en streaming sufrirá debido a los gastos adicionales por los derechos de cricket en India. Disney compró el negocio de India en 2019 como parte de su adquisición por US$71.300 millones de la mayor parte de 21st Century Fox.
“Estamos satisfechos con los progresos que estamos haciendo en streaming, aunque, como hemos dicho antes, el camino hacia la rentabilidad a largo plazo no es lineal”, dijo Johnston en una llamada con inversores.
Las acciones cayeron hasta un 9,6% este martes por la mañana en Nueva York, la mayor caída desde noviembre de 2022. Habían ganado un 29% este año hasta el cierre del lunes.
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El CEO Bob Iger está en medio de un esfuerzo de años para reorganizar Disney en la era del streaming, ya que la compañía pierde suscriptores a los paquetes de televisión por cable. Iger, que ha estado bajo la presión de los inversores activistas, ha recortado agresivamente los costos, ha apuntalado ESPN y ha dado nueva vida a los estudios de Disney después de los fracasos de taquilla.
En el segundo trimestre fiscal, la empresa tuvo que hacer frente a una pérdida de valor de unos US$2.000 millones relacionada con el acuerdo con India y con sus cadenas de televisión tradicionales. Esto llevó a la empresa a una pérdida de US$20 millones, después de haber registrado un beneficio neto de US$1.270 millones un año antes.
La empresa espera que todo su negocio de streaming sea rentable en el cuarto trimestre fiscal.
Steve Severinghaus, analista de Emarketer, señala en una nota a los inversores que “las escasas previsiones sobre el streaming de entretenimiento para el próximo trimestre podrían frenar el entusiasmo”. “Con todo, las noticias de hoy refuerzan el argumento de Iger de que Disney está en medio de un cambio de rumbo largamente esperado”.
Los parques temáticos de Disney registraron un aumento de los ingresos del 10% en el segundo trimestre y el segmento registró una ganancia del 12% en los ingresos de explotación. Pero Johnston dijo que espera poco crecimiento en los parques en el periodo actual, debido a gastos como un nuevo crucero, antes de reanudar el crecimiento más adelante en el año.
Los beneficios de la división de parques temáticos de Disney ascendieron a US$2.290 millones en el segundo trimestre, impulsados por unos resultados muy superiores a escala internacional, especialmente en Hong Kong. En el ámbito nacional, la línea de cruceros y el complejo Disney World de Florida registraron un aumento de los ingresos, mientras que Disneylandia, en California, registró unos resultados más flojos debido al aumento de los costos.
“Aunque los consumidores siguen viajando en cifras récord y la demanda se mantiene en buen nivel, se observa cierta moderación global con respecto al máximo de viajes registrado tras la crisis de los cohetes”, declaró Johnston en la conferencia.
No todo es negativo
A pesar de estos contratiempos, Disney presentó un sólido informe del segundo trimestre.
Los beneficios ascendieron a US$1,21 por acción, excluidos algunos elementos, en el periodo finalizado el 30 de marzo, superando la media de US$1,12 estimada por los analistas. Los ingresos en los tres primeros meses del año aumentaron un 1,2%, hasta US$22.080 millones, frente a la previsión de los analistas de US$22.100 millones. Disney elevó sus previsiones de crecimiento de beneficios para todo el año del 20% al 25%.
Los resultados de beneficios marcan el cuarto trimestre consecutivo en el que Disney ha superado las expectativas, en una señal de que el cambio está ganando impulso bajo la dirección de Iger. Estas ganancias ayudaron a Iger a derrotar al inversor activista Nelson Peltz, que hizo campaña sin éxito por un puesto en el consejo de administración de Disney en la reunión anual de abril.
La parte de entretenimiento de la unidad de venta directa al consumidor de la empresa, que incluye Disney+ y Hulu pero no ESPN+, registró un beneficio de US$47 millones, ya que el crecimiento de las ventas superó los mayores costes de programación y marketing.
“Obtuvimos beneficios antes de lo que esperábamos, ya que los costes fueron mejores de lo previsto”, dijo Johnston en una entrevista telefónica.
¿Por qué Disney no estrenó ninguna película en el trimestre?
Disney no estrenó ninguna película en el trimestre, en parte debido a las dos huelgas de guionistas y actores del año pasado. Iger está tratando de revitalizar ese negocio retrasando algunas películas para centrarse en la calidad. En la llamada, Iger dijo que Disney estrenará sólo dos películas de Marvel al año, frente a las cuatro anteriores. La unidad que incluye el estudio de cine registró una pérdida de US$18 millones en el trimestre, con un descenso del 40% en las ventas.
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Las cadenas de televisión tradicionales, que alguna vez fue un motor de crecimiento de la empresa, registraron resultados más débiles. Las ventas cayeron un 8%, hasta US$2.770 millones, en la unidad que incluye ABC, Disney Channel y otras cadenas de televisión. Los beneficios cayeron un 22%, hasta US$752 millones, debido a las menores ventas de publicidad y al menor número de abonados al cable.
En el segmento de deportes, que alberga ESPN y otras cadenas relacionadas, las ventas aumentaron un 2%, hasta US$4.310 millones, mientras que los beneficios cayeron un 2%, hasta US$778 millones, debido en parte al aumento de los cánones por derechos nacionales.
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