Bloomberg — Elon Musk necesitaba urgentemente una victoria rápida para Tesla Inc. (TSLA). Si eso significaba volar a China una semana después de dejar plantado al primer ministro indio Narendra Modi, que así fuera.
El viaje sorpresa del multimillonario a Pekín el domingo para reunirse con funcionarios, incluido el primer ministro Li Qiang, dio sus frutos de inmediato. Tesla obtuvo una aprobación provisional para desplegar sus funciones más avanzadas de asistencia al conductor en China, lo que podría aumentar sus ingresos en su segundo mercado más importante.
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Al negocio chino de Tesla le vendría bien el impulso: la empresa ha recortado repetidamente los precios en los últimos 18 meses hasta niveles que podrían haber anulado por completo los beneficios del país. Las acciones de la empresa se dispararon hasta un 14% antes del inicio de la negociación regular del lunes, ampliando un rally posterior a los resultados.
El momento también le viene bien a China. El Gobierno ha estado intentando persuadir a los inversores extranjeros de que su economía sigue abierta a los negocios, a pesar de las medidas represivas y la crisis deflacionista. Uno de los países con los que ha salido perdiendo en medio de toda esta agitación es India, a cuyos dirigentes Musk dejó colgados hace poco más de una semana, citando problemas acuciantes para Tesla.
El viaje de Musk “forma parte de un panorama más amplio en el que el Gobierno de Pekín y los gobiernos locales quieren abrirse más a la inversión extranjera”, afirma You Chuanman, director del Centro de Regulación y Gobernanza Global del IIA de la Universidad China de Hong Kong-Shenzhen.
Para el Gobierno, existe la ventaja añadida de ser visto como acogedor con una destacada empresa estadounidense justo después de que el Presidente Joe Biden promulgara un proyecto de ley que obliga a la empresa matriz de TikTok a vender su participación o ser prohibida en las tiendas de aplicaciones. “Eso podría considerarse una señal de Pekín de lo diferente que es para el Gobierno chino aceptar o dar la bienvenida a los inversores extranjeros, mientras que en EE.UU. es todo lo contrario”, afirma You.
Alfombra roja
La visita de Musk fue en cierto modo un regreso a un refugio seguro.
Tesla ocupa una posición única entre las empresas extranjeras más favorecidas de China. Fue el primer fabricante internacional de automóviles en operar sin tener que formar una empresa conjunta con un fabricante local, una excepción que no se concedió a empresas como Volkswagen AG o General Motors Co. (GM) La aprobación de este acuerdo fue facilitada por Li, antiguo jefe del partido en Shanghái y actual número dos de China.
Este trato de alfombra roja contrasta con el prolongado impasse de Tesla con India, cuyas políticas comerciales y fiscales han sido poco acogedoras para los fabricantes de automóviles extranjeros. Musk dijo en 2022 que Tesla no establecería plantas de fabricación en países en los que no se le permitiera vender y reparar vehículos.
Los lazos de Tesla con la India han mostrado signos de fortalecimiento en los últimos meses, con expectativas crecientes de que Tesla podría comprometerse a invertir unos US$2.000 millones en una planta de vehículos eléctricos, y el gobierno reduciendo los impuestos a la importación de vehículos de fabricantes de automóviles extranjeros que se comprometen a invertir en la fabricación local.
Pero cualquier anuncio de este tipo se ha aplazado. Musk canceló su visita a la India un día antes de aterrizar, justo cuando empezaban las elecciones. El auge económico del país es uno de los principales objetivos de la campaña de Modi para un tercer mandato.
El viaje a Pekín provocó la ira de algunos usuarios destacados de X, la plataforma antes conocida como Twitter de la que Musk se hizo cargo en 2022. El presentador de televisión Sumanth Raman se preguntó por qué el trabajo urgente en Tesla impedía a Musk visitar la India, pero no le impedía viajar a China.
El aplazamiento del viaje de Musk a la India puede reflejar un cambio de estrategia. El CEO anunció la semana pasada que Tesla estaba acelerando nuevos modelos que la compañía producirá en las mismas líneas de fabricación que su línea actual. Los analistas han especulado que esto podría significar que el fabricante de automóviles retrasará aún más la construcción de una nueva fábrica en México, por no hablar de una planta en la India.
Los fabricantes de automóviles extranjeros han tenido problemas para encontrar el éxito a largo plazo en la nación más poblada del mundo. Ford Motor Co. (F) dijo en 2022 que estaba explorando alternativas para sus instalaciones de fabricación en la India, un año después de anunciar que dejaría de fabricar coches en el país. Toyota Motor Corp. (TM) dijo en 2020 que no seguiría expandiéndose debido a los altos aranceles, aunque desde entonces ha anunciado planes para fabricar algunos componentes de vehículos eléctricos en el país.
Funcionarios indios esperan que Musk invierta en un futuro próximo debido a los recientes cambios en las políticas de vehículos eléctricos, según una persona familiarizada con el asunto, que pidió no ser identificada porque las conversaciones son privadas.
En última instancia, la decisión de Musk de visitar China subraya la urgencia de que Tesla vuelva a ponerse en marcha. Los vehículos eléctricos representan solo una pequeña parte del mercado automovilístico del país. En China, la aprobación del sistema que Tesla comercializa como Full Self-Driving puede ayudar a la empresa a recuperar parte de la cuota de mercado que ha perdido frente a los fabricantes nacionales, liderados por BYD Co.
Ltd. “China es el eje de todo lo que Tesla quiera hacer. China es un mercado imprescindible en términos de ventas de vehículos, e India es un mercado interesante”, afirma Tu Le, director general de la consultora Sino Auto Insights. “En resumen: Tesla no puede alcanzar ninguno de sus ambiciosos objetivos futuros sin seguir teniendo éxito en el mercado chino”.
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