Las acciones de Tesla se disparan mientras los inversores apuestan por el robotaxi de Musk

Musk ha dominado el arte de mantener a los inversores centrados en el futuro en lugar de en los puntos de dolor actuales, aunque Tesla suele tardar años en poner en producción los productos que muestra su CEO

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Bloomberg — Cuando Elon Musk anunció que presentaría un robotaxi de Tesla Inc. (TSLA) en agosto fue claro su intento de detener la espiral de la otrora gran empresa automovilística.

Las acciones de Tesla ya se habían hundido antes de que la empresa presentara unas cifras de entregas trimestrales débiles el 2 de abril. Días después, Reuters informó de que el fabricante de automóviles estaba dando archivando sus planes de un vehículo eléctrico más barato, lo que extendió la caída en picado. La vaga negación de Musk no funcionó: la acción cerró la semana pasada como la de peor desempeño en el S&P 500 este año.

Así que el CEO recurrió a su método de siempre: cambiar la narrativa con un nuevo producto. Las acciones se dispararon en las últimas operaciones del viernes y subieron un 5,3% a las 13:14 horas del lunes en Nueva York.

Los eventos llamativos forman parte de la estrategia de Tesla para generar expectación sin gastar casi nada en publicidad tradicional. Musk ha dominado el arte de mantener a los inversores centrados en el futuro en lugar de en los puntos de dolor actuales, aunque Tesla suele tardar años en poner en producción los productos que muestra su CEO.

En cuanto a robotaxis, Musk lleva más de una década sin cumplir sus predicciones sobre vehículos autónomos.

“Los inversores deben frenar parte de su entusiasmo con esta acción y sus diversos anuncios de productos, ya que tiende a haber un amplio abismo entre el bombo/especulación y la realidad”, dijo Adam Crisafulli, fundador de la firma de análisis Vital Knowledge, por correo electrónico. “Esto parece ser un ejemplo de Tesla tratando de distraer de las condiciones actuales del mercado de vehículos eléctricos, que son muy sombrías en este momento”.

Flujo y reflujo

Musk rechazó el lunes las sugerencias de problemas en el mercado en un debate con Nicolai Tangen, director del gigante inversor Norges Bank Investment Management, uno de los mayores accionistas de Tesla.

“Habrá altibajos en el avance de los coches eléctricos, pero la victoria final de los coches eléctricos es inevitable”, dijo Musk durante el evento, retransmitido en directo en su página web X. La pareja no habló del robotaxi que Tesla tiene previsto desarrollar ni del coche de bajo coste.

Cuando Tesla comenzó a trabajar en el sistema que comercializa como Autopilot en 2013, Musk estimó que sería capaz de manejar el 90% de los kilómetros que los clientes conducían en unos pocos años. En 2016, Musk aludió a la autonomía en una segunda iteración de su plan maestro para la compañía, y Tesla empezó a vender una función llamada Full Self-Driving, o FSD. Ocho años después, el sistema sigue sin estar a la altura de su nombre.

En 2019, Musk declaró que 1 millón de Teslas pronto estarían en la carretera y serían totalmente capaces de conducirse solos. Insinuó por primera vez planes para un robotaxi dedicado tres años más tarde.

Un patrón similar se ha reproducido con otros productos de Tesla. Por ejemplo, el Semi, que Tesla mostró en su estudio de diseño cerca de Los Ángeles en 2017. Años más tarde, el Semi todavía está solo en producción piloto.

Lo mismo ocurre con el Cybertruck. En 2019, el diseñador jefe Franz von Holzhausen rompió la ventana de cristal de un prototipo de acero inoxidable. Años después, la futurista pick-up se deja ver escasamente en ciudades como Austin y Los Ángeles, pero las ventas son tan bajas que Tesla aún no ha desglosado cifras en sus informes trimestrales.

Permanezca atento

Tesla ha sugerido que su plataforma de vehículos de próxima generación servirá de base tanto para un coche más barato como para el robotaxi específico, y se espera que los vehículos sean similares: uno tendrá volante, el otro no.

El domingo por la mañana, von Holzhausen condujo su Cybertruck negro mate para hablar en el Petersen Automotive Museum de Los Ángeles, donde estuvo rodeado de fans de Tesla que le pedían selfies y autógrafos. Cuando se le preguntó si el vehículo de US$25.000 de Tesla había sido cancelado, despriorizado o retrasado, respondió con evasivas.

“Yo solo diría: estad atentos”, dijo von Holzhausen. “No creas siempre en lo que lees”.

En las últimas semanas, Tesla ha distribuido la última versión de FSD a un número cada vez mayor de consumidores, algunos a través de pruebas gratuitas. El viernes, la empresa anunció que sus clientes habían recorrido colectivamente más de 1.000 millones de kilómetros con esta función.

“Como el progreso del FSD es tan rápido ahora mismo, creo que Elon dijo: ‘Centrémonos en esto y dejemos el coche de 25.000 dólares en un segundo plano’”, dijo Mike Moon, un accionista de Tesla que asistió al evento del VE en el museo Petersen. Moon dijo que aproximadamente el 30% de su cartera de inversiones son acciones de Tesla y que está comprando más acciones

Software esencial

La promesa de plena autonomía ha sido durante mucho tiempo una de las formas en que Tesla se ha diferenciado de sus rivales. La empresa cobra US$12.000 por el FSD en EE.UU., una suma considerable que podría compensar parte de su reciente recorte de precios, pero solo si Tesla puede convencer a más clientes de que la función merece la pena.

“Para mantener el liderazgo del mercado, Tesla necesita coches más baratos y una conducción autónoma completa, pero el FSD es más importante”, afirma Cole Wilcox, CEO de Longboard Asset Management. “El software y los servicios son un modelo de negocio mucho mejor que la fabricación”.

Esto es algo que Musk también ha afirmado. “Eso es esencial”, dijo Musk sobre resolver la autoconducción en junio de 2022. “Esa es realmente la diferencia entre que Tesla valga mucho dinero o valga básicamente cero”.

En las próximas semanas se sabrá si los inversores están dispuestos a creer en la última apuesta de Musk, ya que Tesla tiene previsto presentar sus resultados del primer trimestre el 23 de abril.

Crisafulli, de Vital Knowledge, dice que los inversores de Tesla deberían tomarse con calma el bombo del robotaxi.

“Por un lado, implica la existencia de un sistema de conducción totalmente autónomo, que podría ser una nueva fuente de ingresos muy lucrativa”, dijo Crisafulli. “Pero hasta ahora, tal sistema no existe”.

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