Presidente del Banco Central de Brasil a sucesor: ‘hay que tener la firmeza de decir no’

Roberto Campos Neto cree que la autonomía de la institución exige que la dirección sea capaz de soportar presiones cuando sea necesario, citando los cambios en los ciclos económicos

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Bloomberg Línea — El presidente del Banco Central de Brasil, Roberto Campos Neto, afirmó el miércoles (3) que el desafío más importante para el responsable del organismo es “tener la firmeza de decir no cuando sea necesario”.

Al comentar la autonomía del Banco Central del país y su proceso de sucesión, Campos Neto dijo que, en algún momento, la persona a cargo de la autoridad monetaria tendrá que decir no ante los cambios en el ciclo económico y las preferencias en relación con las políticas públicas.

“Estamos en un período en el que vamos a tener cambios que vienen con este proceso de autonomía del banco central. Yo diría que lo más importante para asuma es tener la firmeza de decir no cuando sea necesario. Será necesario y siempre lo es en algún momento decir no”, dijo Campos Neto durante un evento organizado por Bradesco BBI en São Paulo en la mañana del miércoles (3).

“Es importante [tener la firmeza de decir no] porque los ciclos son diferentes, los deseos serán diferentes, la comprensión de lo que es bueno será diferente”, dijo.

Incertidumbre en el mercado

El mandato del actual presidente del Banco Central termina a finales de 2024, y la cuestión ha cobrado cada vez más relevancia entre los agentes del mercado financiero, ya que debería influir en la política monetaria de los próximos años.

Una de las cuestiones del mercado es si la incertidumbre en torno al nuevo presidente, que será nombrado por el presidente Luiz Inácio Lula da Silva, contribuye a aumentar las expectativas de inflación para 2025 y 2026.

El último Boletim Focus (un resumen semanal de las expectativas del mercado para algunos indicadores de la economía brasileña), publicado el martes (2), apunta a una estimación mediana del 3,51% para el Índice Nacional de Precios al Consumo Amplio (IPCA) en 2025 y del 3,50% para 2026, ambas por encima del objetivo de inflación del 3%.

Desde que Lula asumió la presidencia en enero de 2023, Campos Neto ha sido criticado públicamente por el presidente por su política restrictiva de tipos de interés, en un entorno de inflación y expectativas por encima del objetivo.

El presidente ya ha nombrado a cuatro directores para el Banco Central, entre ellos Gabriel Galípolo, ex secretario del Ministerio de Finanzas de Fernando Haddad, que ahora se encarga de la Política Monetaria.

“Cuando miramos el mercado, esa prima de riesgo que teníamos con el cambio de gestión ha bajado mucho. Las últimas decisiones [del Comité de Política Monetaria (Copom)] han sido unánimes”, afirmó Campos Neto.

Al participar en el mismo evento de Bradesco el martes, Haddad dijo que ha estado hablando sobre la sucesión en el Banco Central y que no ve ningún problema con el proceso.

El ministro recordó que el presidente Lula ya nombró a cuatro directores, sin que esto causara ningún problema, y dijo que el presidente debería tener tranquilidad a la hora de decidir sobre el próximo jefe del Banco Central. Para Haddad, este debe ser un proceso tranquilo y natural.

Campos Neto promete una transición tranquila

Al ser preguntado sobre la transición, el presidente del Banco Central de Brasil dijo que, en su opinión, sería importante celebrar una audiencia en el Senado para su sucesor a finales de este año, de modo que no fuera necesario nombrar a un interino cuando termine su mandato el 31 de diciembre.

“Si un director asume el cargo de presidente interino, también tiene que pasar por una audiencia. Pero entonces no hay audiencia porque el Congreso está cerrado”, dijo.

Independientemente del nombre elegido, el presidente del Banco Central de Brasil dijo que trabajará para que la transición se realice de la forma más tranquila posible y afirmó que los procesos turbulentos de cambio de gobierno son malos para Brasil desde el punto de vista institucional.

“Esta cosa en la que se cambia de un gobierno a otro, en la que el gobierno entrante habla mal del otro, tenemos una transición que no es civilizada. Creo que esto es muy malo para la parte institucional de Brasil. Podemos tener pensamientos diferentes, pero al final, todo el mundo piensa en Brasil”, afirmó.

En cuanto al rol del Banco Central autónomo, Campos Neto dijo que es necesario explicar que el ciclo de la política monetaria es diferente y tiene un calendario y unos tiempos específicos.

“Al final, el peor problema que tenemos en un país [es la inflación]... Lo vimos en Argentina. Lo estamos viendo en Turquía. La inflación erosiona enormemente el poder adquisitivo de los de abajo [de los tramos de renta]. El mejor plan económico es tener una inflación baja y estable”, afirmó.