Bloomberg — Un jet de lujo que estaba destinado a transportar al cofundador de FTX, Sam Bankman-Fried, y a otros ejecutivos hacia y desde las Bahamas antes de que la plataforma de criptomonedas se declarara en quiebra está siendo entregado a las autoridades estadounidenses.
Según documentos presentados el viernes por los fiscales federales, el jet, un Embraer Legacy EMB-135BJ, está siendo volado desde las Bahamas a Florida, donde será entregado a las autoridades encargadas de hacer cumplir la ley. Los alguaciles estadounidenses ya han confiscado un segundo jet que también iba a ser utilizado por FTX. Las autoridades están buscando permiso judicial para vender ambas aeronaves.
El Legacy había sido retenido por una empresa de charters bahameña y estaba sujeto a una disputa de propiedad en la bancarrota de FTX. Paul Aranha, fundador de Trans Island Airways, declaró bajo juramento el año pasado que adquirió la aeronave con financiamiento de FTX como parte de un acuerdo de palabra con Bankman-Fried.
Un portavoz de FTX dijo que los asesores de la empresa trabajaron estrechamente con el gobierno de Estados Unidos en el acuerdo para devolver el Legacy, la segunda aeronave adquirida con fondos corporativos recuperados durante el caso de bancarrota del Capítulo 11.
Aranha ha afirmado que comenzó a volar a Bankman-Fried hacia y desde las Bahamas en 2021, aproximadamente un año antes de que FTX se declarara en quiebra del Capítulo 11. Según Bloomberg News, Bankman-Fried viajaba regularmente en jet privado entre las Bahamas, Nueva York y Washington el año anterior a la quiebra de FTX.
A partir de octubre de 2021, el negocio de charters de Aranha proporcionó más de US$15 millones en vuelos chárter privados y de carga, así como otros servicios a Bankman-Fried, otros ejecutivos de FTX, empleados y sus amigos y familiares, según una presentación judicial de septiembre. En enero de 2022, el volumen de vuelos requirió aeronaves adicionales que Aranha adquirió con financiamiento de FTX, según los documentos judiciales.
Bankman-Fried nunca tuvo la oportunidad de disfrutar del Legacy o del segundo jet, un Bombardier Global 5000 BD-700-1A11. Según los documentos judiciales, FTX solicitó WiFi de última generación y nuevas interiores, mejoras que aún se estaban trabajando en el momento en que FTX colapsó en noviembre de 2022. Como resultado, ninguna persona asociada con FTX voló en el Global o en el Legacy, según Aranha.
Las autoridades federales han acordado compensar a Aranha y sus empresas por los costos de mantenimiento incurridos antes de que los jets fueran confiscados y los gastos asociados con el transporte del Legacy a Estados Unidos.
Según los documentos judiciales, el Legacy será entregado en el Aeropuerto Ejecutivo de Ft. Lauderdale, Florida.
Lea más en Bloomberg.com