Buenos Aires — La inflación en Argentina se ubicó durante febrero en 13,2%, con lo que la medición acumulada fue de 36,6% y la interanual, de 276,2%; de acuerdo con datos difundidos por el Indec.
El dato fue menor al esperado por la mayoría de las consultoras económicas del país, que habían anticipado un rango de entre el 14-17% mensual.
El Índice de Precios al Consumidor (IPC) de enero había llegado a 20,6%, mientras que en diciembre se había dado un pico inflacionario de 25,5%.
El registro de febrero estuvo en línea con lo anticipado por el Gobierno. En las últimas horas, en diálogo con el canal de televisión Crónica, el presidente Javier Milei había manifestado: “Parece que está debajo del 15%”, lo que calificó como “numerazo”.
Calculadora de inflación acumulada en Argentina
Por su parte, el ministro de Economía, Luis Caputo, había adelantado que la expectativa oficial apuntaba a una inflación más cerca del 10% que del 20%.
El dato oficial se conoció solamente unas horas después de la reunión entre Caputo con representantes de los supermercados, en la que el titular del Palacio de Hacienda manifestó que los precios de los productos de consumo masivo no reflejan la nueva realidad económica.
A su vez, el Banco Central se anticipó al dato de inflación y recortó 20 puntos porcentuales la tasa de política monetaria. Además, eliminó la obligatoriedad de ofrecer tasas mínimas para los plazos fijos minoristas.
Los rubros que más subieron
La división de mayor aumento en el mes fue Comunicación (24,7%), producto de subas en servicios de telefonía e internet. Le siguieron Transporte (21,6%), por los incrementos en el transporte público, y Vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles (20,2%) ante alzas en el servicio de electricidad.
La división con mayor incidencia en todas las regiones fue Alimentos y bebidas no alcohólicas (11,9%). “Al interior de la división se destacan las subas de Carnes y derivados; Pan y cereales; y Leche, productos lácteos y huevos”, aseguró el Indec.
Empresarios, preocupados por el consumo y la inflación
En el ámbito empresarial argentino del rubro de productos de consumo masivo y para el hogar predomina la preocupación por la fuerte caída de la demanda en los primeros meses del año y apuestan sus fichas a una mejora para el segundo semestre.
La erosión del poder adquisitivo impulsada por una inflación histórica golpeó a los consumidores y causó un derrumbe en las ventas. Para algunas compañías, se trata de la mayor caída desde la pandemia.
Desde una firma alimenticia líder aseguraron a Bloomberg Línea que la baja de las ventas se ubica en torno al 20% para el primer bimestre del año en la comparación interanual, al tiempo que una jugadora clave en el rubro de electrodomésticos aseguró que la merma llega, en su caso, al 30% para ese mismo período.
Si bien no todos los artículos se desplomaron de igual manera, el empresariado nota un común denominador: lo que no es considerado indispensable para la vida diaria se suspende, reemplaza o posterga.
En tanto, una mayor certidumbre respecto del rumbo económico y más alternativas para financiación son algunos de los factores que los empresarios ven como los principales obstáculos a superar para que la actividad se pueda recuperar.
Respecto del impulso a la apertura de importaciones que anunció el Gobierno, desde el sector alimenticio estimaron que el impacto será mayor en productos secos que en frescos. Además, remarcan que no es fácil la implementación rápida del regimen y que en el rubro se registran pérdidas, pese a los aumentos de precios.