Bloomberg — Whirlpool Corp. (WHRL4), fabricante de KitchenAid y Maytag, confía en que su negocio de pequeños electrodomésticos le ayude a remontar unas ventas presionadas por la debilidad del mercado inmobiliario estadounidense.
La empresa tiene previsto introducir este año nuevas cafeteras espresso totalmente automáticas, ya que los compradores, preocupados por la inflación, están renunciando a comprar electrodomésticos más grandes. Whirlpool también planea impulsar el crecimiento con accesorios para la batidora y otros aparatos de encimera, como batidoras y procesadores de alimentos, dijo en una presentación a los inversores el martes. Los pequeños electrodomésticos de Whirlpool generan márgenes más altos que el resto de su negocio.
“La gente pasa mucho más tiempo en casa”, dijo Ludovic Beaufils, vicepresidente ejecutivo de pequeños electrodomésticos de KitchenAid, durante una presentación a los inversores. “La comodidad de poder preparar su espresso o bebida de café favorita en casa es lo que perseguimos”.
La empresa también puede crecer vendiendo más batidoras sin cable, molinillos y batidoras de mano, que se introdujeron en el otoño de 2023 y funcionan con batería, dijo Beaufils.
El fabricante con sede en Benton Harbor, Michigan, que obtiene más de la mitad de sus ingresos de América del Norte, ha estado tratando de reducir los costes mediante la reducción del número de componentes en los productos, la simplificación de sus fábricas y el recorte de personal corporativo. Whirlpool también se está desprendiendo de su línea de grandes electrodomésticos en Europa para centrarse en negocios con mayor crecimiento y márgenes.
Las acciones subían un 1,8% a las 12:54 horas en Nueva York. Whirlpool ha perdido cerca de un 10% este año, a la zaga del índice S&P 500.
Mientras tanto, Whirlpool dijo que espera unas ventas netas de US$17.200 millones en 2026, frente a la estimación media de los analistas de US$17.900 millones, según datos recopilados por Bloomberg. La empresa reafirmó su previsión de ingresos para el año en curso. También tiene como objetivo reducir hasta US$400 millones en costes adicionales en 2025 y 2026 combinados, frente a los US$400 millones del año en curso.
Los estadounidenses se han estado saltando las compras de nuevos electrodomésticos con las ventas de viviendas existentes en los niveles más bajos en más de 25 años. El negocio discrecional de Whirlpool, estrechamente vinculado a las ventas de viviendas, ha sido débil, especialmente en Norteamérica.
Pero espera atraer a los consumidores con nuevas opciones menos costosas para apoyar la cocina doméstica, que ha experimentado un renacimiento tras las restricciones de Covid-19. La empresa tiene previsto introducir más de 100 nuevos productos este año, una cifra superior a la del año pasado.
Este año, Whirlpool se centra en reducir su deuda y pagar dividendos, además de invertir para apoyar la innovación. Las adquisiciones no son una prioridad para la empresa en 2024, dijo el director financiero Jim Peters.
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