La UFC (siglas que condensan el nombre oficial Ultimate Fighting Championship) es la principal es la mayor empresa de artes marciales mixtas en el mundo y en las últimas dos décadas se ha consolidado como una máquina de generar dinero, al punto de superar en ganancias a los promotores de boxeo.
Actualmente, el principal accionista de la UFC es el conglomerado William Morris Endeavor, a través de la firma Zuffa. En tanto, el presidente de la asociación es Dana White, que conduce los destinos de la entidad desde el año 2001.
Empresa multimillonaria
Durante el año 2022, último del cual hay cifras fidedignas, la UFC obtuvo beneficios por US$387 millones, según difundió el periodista especializado Luke Thomas.
Según Thomas, en aquel año la entidad recaudó más dinero que todos los promotores de boxeo y resto de artes marciales juntos.
Los dueños del show
La compañía es presidida desde 2001 por el ejecutivo Dana White, un empresario de clase trabajadora nacido en 1969, criado por su madre, una enfermera madre de dos hijos. White nació en Connecticut, pero antes de los diez años se mudó a Las Vegas, donde fue a la escuela y conoció a Lorenzo Fertitta, quien años más tarde le cambiaría la vida, según detalla un artículo publicado por ESPN.
White fue expulsado de las escuela en distintas oportunidades y terminó sus estudios secundarios en Maine. Intentó infructuosamente ser universitario, pero abandonó la facultad en dos ocasiones antes de finalizar el primer semestre. Durante este tiempo, tuvo varios trabajos, como colocar asfalto, trabajar como portero en un bar irlandés y ser botones en el Boston Harbor Hotel.
En paralelo, practicaba boxeo y entabló un amistad con Peter Welch, un ex boxeador con quien abrió un gimnasio para boxeadores en Boston.
Según se puede recoger de diversos medios especializados en deportes, White abandonó Boston para regresar a Las Vegas a principios de la década de 1990, según su versión, tras ser amenazado por el mafioso Whitey Bulger y su socio Kevin Weeks. En Las Vegas continuó con el negocio de los gimnasios de boxeo y retomó su amistad con Lorenzo Fertitta y con su hermano Frank Fertitta III, quienes ya eran dos adinerados empresarios. Lorenzo era ejecutivo y confundador de Station Casinos.
Ya en Las Vegas, White empieza a entrenar jiu-jitsu, bajo la tutela de John Lewis y, precisamente, en uno de los entrenamientos de Lewis conoce a los luchadores de UFC Tito Ortiz y Chuck Liddell y termina convirtiéndose en su mánager e ingresando en ese negocio.
Mientras trabajaba con ellos dos, White conoció a Bob Meyrowitz, propietario de Semaphore Entertainment Group, UFC. Cuando White supo que Meyrowitz quería vender la UFC, se puso en contacto con su amigo de la infancia Lorenzo Fertitta para preguntarle si estaría interesado en adquirir la empresa. En enero de 2001, Lorenzo y su hermano mayor Frank adquirieron la UFC por 2 millones de dólares y nombraron a White como presidente.
White asegura que cuando él y los Fertitta adquirieron la UFC, todo lo que recibieron fue la marca “UFC” y un viejo octágono. Los anteriores propietarios habían despojado a la empresa de sus activos para evitar la quiebra, hasta el punto de que el sitio web UFC.com había sido vendido a una empresa llamada “User Friendly Computers”.
Al cabo de unos años, la UFC se convirtió en el gigante que conocemos hoy. En 2016, sin embargo los hermanos Fertitta, decidieron vender por US$4.000 millones a William Morris Endeavor, empresa que sostuvo a White como titular de la UFC, según detalla un artículo de aquel momento de Business Insider.
ESPN catalogó a esa operación como “sin precedentes”, dado que los Fertitta compraron la empresa en US$2 millones y la vendieron en US$4.000 millones.