Bloomberg — Bitcoin (XBT) sigue siendo un fenómeno pernicioso sin valor intrínseco a pesar de su aprobación en Estados Unidos como un activo para la inclusión en fondos cotizados en bolsa, escribieron dos miembros del personal del Banco Central Europeo.
La publicación de blog el jueves por Ulrich Bindseil, director general de infraestructura del mercado y pagos de la institución de Frankfurt, y Juergen Schaaf, asesor, reitera su opinión de hace mucho tiempo de que la moneda digital presenta riesgos tanto para la sociedad como para el medio ambiente.
“Para los seguidores, la aprobación formal confirma que las inversiones en Bitcoin son seguras y el rally anterior es prueba de un triunfo imparable”, dijeron los funcionarios. “No estamos de acuerdo con ambas afirmaciones y reiteramos que el valor justo de Bitcoin sigue siendo cero”.
La Comisión del Mercado de Valores aprobó en enero los primeros ETF de bitcoin al contado de EE.UU. tras la derrota judicial del año pasado. El grupo de 10 carteras ha atraído una entrada neta de US$5.200 millones desde su puesta en marcha. El precio del bitcoin se ha disparado, un aumento que, según Bindseil y Schaff, podría ser efímero.
“Sin ningún flujo de efectivo u otro rendimiento, el valor justo de un activo es cero”, escribieron. “Desvinculados de los fundamentos económicos, cada precio es igualmente (in)plausible, una condición fantástica para los vendedores de medicina milagrosa”.
Los autores citaron tres razones para la resistencia de bitcoin: “la manipulación continua del ‘precio’ en un mercado no regulado sin supervisión y sin valor justo, la creciente demanda de la ‘moneda del crimen’ y las deficiencias en los juicios y medidas de las autoridades”.
Bindseil y Schaaf observaron que lo principal que muestra el valor general de los activos de bitcoin es la magnitud de las consecuencias potenciales si todo termina en lágrimas.
“La capitalización de ‘mercado’ cuantifica los daños sociales generales que ocurrirán cuando el castillo de naipes se derrumbe”, escribieron. “Es importante que las autoridades estén vigilantes y protejan a la sociedad del lavado de dinero, el ciberdelito y otros delitos, las pérdidas financieras para los menos educados financieramente y el daño ambiental extenso. Este trabajo aún no se ha hecho”.
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