Bloomberg — Israel recibió su primera rebaja soberana de Moody’s Investors Service, que redujo su calificación crediticia citando el impacto del conflicto militar en curso con Hamas en sus finanzas.
El país fue rebajado en un escalón a A2, la sexta calificación más alta y en el mismo nivel que Polonia y Chile. Moody’s cambió la perspectiva a negativa, concluyendo una revisión que comenzó en octubre.
El conflicto y sus consecuencias "elevarán materialmente el riesgo político para Israel, así como debilitarán sus instituciones ejecutivas y legislativas y su solidez fiscal, en el futuro previsible", dijo Moody's en su comunicado del viernes, añadiendo que "espera que la carga de la deuda de Israel sea sustancialmente mayor de lo proyectado antes del conflicto".
El primer ministro Benjamin Netanyahu afirmó que la decisión no refleja el estado de la economía del país.
"Es completamente debido a que estamos en guerra", declaró en un comunicado. "La calificación volverá a subir tan pronto como ganemos la guerra".
El conflicto, que estalló hace más de cuatro meses, está tensando las finanzas públicas al llevar el presupuesto a números rojos. Los costos fiscales del peor conflicto armado de Israel en 50 años también están obligando al gobierno a depender mucho más de la deuda para financiar sus necesidades y pagar una factura de guerra que el banco central estima en 255 mil millones de shekels (US$69 mil millones) entre 2023 y 2025.
El presupuesto revisado del gobierno para 2024, que está pendiente de aprobación final en el parlamento a finales de este mes, se enfrentará a un déficit del 6,6% del producto interno bruto, lo que sería uno de los más amplios para Israel en este siglo. El déficit fue mayor solo en 2020, cuando el gobierno gastó y se endeudó en gran medida para contener las consecuencias económicas de la pandemia de coronavirus y los bloqueos que la siguieron.
Los traders ya han tenido en cuenta una posible rebaja, lo que significa que un recorte tendría un impacto limitado en los mercados. El costo de asegurar la deuda de Israel contra un incumplimiento en los próximos cinco años es ahora más alto que para los soberanos de menor calificación como México e Indonesia.
La guerra comenzó el 7 de octubre cuando Hamas se adentró en comunidades del sur de Israel desde Gaza y mató a cerca de 1.400 personas. La ofensiva aérea y terrestre de Israel en represalia ha causado la muerte de más de 27.000 personas en Gaza, según funcionarios sanitarios del territorio gobernado por Hamas.
El panorama de la economía de Israel ahora depende en gran medida de si el conflicto se contiene o no. Desde su inicio, las tres principales agencias calificadoras han emitido advertencias sobre la calificación crediticia del gobierno.
El 25 de octubre, S&P Global Ratings fue la última en revisar la perspectiva a negativa por el riesgo de que la guerra se extienda. Fitch Ratings y Moody’s ya habían colocado la calificación crediticia del país en observación negativa y revisión a la baja, respectivamente.
Lea más en Bloomberg.com