Bloomberg — El diseñador de chips Arm Holdings Plc (ARM) subió más de un 37% el jueves después de que la empresa emitiera una previsión de beneficios sorprendentemente alcista, mostrando que su impulso más allá de los smartphones está ayudando a impulsar el crecimiento.
Los ingresos en los tres meses que terminan en marzo serán de 850 a US$900 millones, dijo Arm en un comunicado el miércoles, superando con creces las previsiones de los analistas de US$778 millones. Los beneficios serán de unos 30 centavos, excluyendo algunas partidas, muy por encima de la estimación de 21 centavos de Wall Street.
Las optimistas perspectivas reflejan la expansión del CEO, René Haas, a nuevos mercados, incluidos los chips para servidores. Los directivos de la empresa afirmaron que el sector de los teléfonos inteligentes representa ahora cerca de un tercio de las ventas de la empresa, lo que subraya el éxito que ha tenido a la hora de extender sus apuestas. Y los teléfonos contienen ahora más tecnología Arm por dispositivo, lo que ayuda a elevar los pagos de derechos.
“Participamos en casi todos los mercados finales”, declaró Haas en una conferencia telefónica con analistas. “Y casi todos los mercados están introduciendo más computación en sus dispositivos”.
La noticia impulsó a Arm a su mayor subida intradía desde su oferta pública inicial el pasado septiembre, alcanzando un máximo histórico de US$106.
Haas y el director financiero Jason Child explicaron que los clientes de la empresa están cambiando a una nueva versión de su tecnología denominada V9, que conlleva el doble de derechos que sus predecesoras. También están utilizando más núcleos de cálculo Arm por dispositivo (más de 100 en los nuevos chips de servidor de Microsoft Corp. (MSFT) por ejemplo), lo que amplifica los derechos de autor. Arm también está ganando cuota de mercado a la tecnología rival en los mercados de los centros de datos y la automoción, dijeron.
Industria de semiconductores clave
La empresa conjunta de Arm en China también fue una “agradable sorpresa positiva”, según Child. Aportó el 25% de los ingresos totales.
Arm prevé ahora unas ventas de entre 3.160 y US$3.210 millones en el ejercicio fiscal 2024, que finaliza en marzo. Esta cifra es superior a la anterior, que se situaba en US$3.080 millones.
Los ingresos aumentaron un 14%, hasta US$824 millones, en el tercer trimestre fiscal. Excluyendo algunos elementos, el beneficio fue de 29 centavos por acción. Wall Street había previsto unos ingresos de US$760 millones y unos beneficios de 25 céntimos por acción.
Arm desempeña un papel poco habitual en la industria de los semiconductores. Licencia el conjunto fundamental de instrucciones que el software utiliza para comunicarse con los chips. La empresa también proporciona los llamados bloques de diseño que empresas como Qualcomm Inc. utilizan para construir sus productos.
Con Haas, Arm ha ido evolucionando hacia el suministro de diseños más completos que puedan llevarse directamente a la fase de fabricación. Ese cambio le hace más útil para algunos clientes, como las empresas de computación en nube como Amazon.com Inc (AMZN), pero también más rival para algunos clientes tradicionales, como Qualcomm.
Arm, con sede en Cambridge (Inglaterra), sigue siendo propiedad en un 90% de SoftBank Group Corp, que adquirió la empresa en 2016 por US$32.000 millones. Una OPV en 2023 recaudó US$4.900 millones, lo que supuso el mayor debut en una bolsa estadounidense en 2023.
Las ventas de licencias de Arm aumentaron un 18%, hasta US$354 millones, el trimestre pasado, y los ingresos por royalties aumentaron un 11%, hasta US$470 millones.
La lista de clientes de Arm abarca toda la industria tecnológica. Apple Inc. utiliza su conjunto de instrucciones para los procesadores del iPhone y los ordenadores Mac. Amazon confía en los diseños de Arm para sus procesadores de servidor Graviton para centros de datos. Y Qualcomm y MediaTek Inc. son importantes usuarios de los planos de Arm para los procesadores de los teléfonos inteligentes.
“Lo que están viendo cobrar vida son todas las estrategias en las que hemos estado trabajando durante varios años”, dijo Haas en la conferencia telefónica. “Por muy buenos que sean los dos últimos trimestres, sólo estamos al principio”.
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