Bloomberg Línea — En las últimas horas, el Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social (MSPAS) de Guatemala dio a conocer que mantiene activa la vigilancia epidemiológica de 39 casos de enfermedad neurológica aguda, detectados en tres departamentos: Suchitepéquez, Retalhuleu y Huehuetenango.
La información también fue notificada por el Centro Nacional de Enlace (CNE) para el Reglamento Sanitario Internacional (RSI) de Guatemala a la Organización Panamericana de la Salud / Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS).
De acuerdo con el diagnóstico preliminar, se trata de una enfermedad neurológica aguda, caracterizada por debilidad en la fuerza muscular, compatible con síndrome de Guillain-Barré.
Para continuar con las acciones de vigilancia, investigación, pruebas y atención sobre el brote o aumento inusitado de casos de enfermedad neurológica aguda, la autoridad de Salud de Guatemala emitió este lunes alerta epidemiológica, haciendo el llamado a la población a mantener la calma, resaltando que la misma, según los datos actuales, no se contagia de persona a persona.
En una conferencia de prensa, la doctora Lorena Gobern, titular de la Dirección de Epidemiología y Gestión de Riesgo, explicó que los 39 casos registrados comprenden las semanas epidemiológicas 1 a la 4, del 31 de diciembre de 2023 al 27 de enero de 2024.
De estos casos, 35 son en municipios de Suchitepéquez, siendo estos: Cuyotenango (12), San Bernardino (5), Samayac (7), Mazatenango (3), Chicacao (2), San Francisco Zapotitlán (2), San Pablo Jocopilas (2) San Lorenzo (1) y Santo Tomás La Unión (1). Además, San Andrés Villa Seca (3), Retalhuleu y un caso en Tectitán, Huehuetenango.
Del total de casos, el 83% de los pacientes tiene entre 30 y 64 años de edad y el 76% son hombres. Hasta el momento, no se registra ningún fallecimiento y más bien, el 73% de los pacientes, equivalente a 28 personas, ha egresado de los servicios hospitalarios en condición satisfactoria, con seguimiento ambulatorio para su total recuperación, informó el MSPAS.
El 75% de pacientes registrados refirieron verbalmente no tener ninguna dosis de vacuna contra COVID-19. Al 77% de los pacientes ingresados se le hizo hisopado para COVID-19 siendo todas negativas. Además, ningún paciente presentaba síntomas o signos sugestivos a infección por arbovirosis (dengue, chikingunya o zika) previo al inicio de los síntomas.
Investigación epidemiológica
El viceministro de Regulación, Vigilancia y Control de la Salud, César Conde, dijo que estará el MSPAS informando de forma constante sobre los hallazgos de la investigación epidemiológica que se realicen.
En la alerta epidemiológica se ha establecido la designación de un equipo multidisciplinario en Suchitepéquez, el cual estará indagando para determinar la existencia de contaminantes en agua o alimentos. Con esta labor, las autoridades buscan las causas del brote o aumento inusitado de casos, así como el proceso de pruebas diagnósticas de la enfermedad.
Además, según Conde, todo caso sospechoso deberá ser investigado y notificado de manera inmediata. En ese sentido, las autoridades de Salud enfatizaron en identificar exposiciones o infecciones previas u otros posibles detonantes del cuadro neurológico en las cuatros semanas previas al inicio de la debilidad muscular como infecciones respiratorias, enfermedad diarreica aguda, infección por arbovirosis, antecedente vacunal y otros.
¿Qué hacer en caso de síntomas?
La doctora Gobern explicó en que al momento que una persona sienta “una debilidad en sus piernas u otra afectación que le imposibilite caminar, debe de consultar inmediatamente, no debe esperar varios días, ya que la debilidad, la pérdida de tensión muscular, empieza a progresar”.
La especialista dijo que la enfermedad puede empezar en las pantorrillas, “luego sube a muslos hasta puede llegar a músculos respiratorios que puede comprometer la vida”.
Respecto del tratamiento, este se hace de manera hospitalaria, a través de “la aplicación de un medicamento especial para coadyuvar al sistema inmunitario de la persona para que ayude a controlar y se regule el proceso inmunológico y deje de atacarse a sí mismo, ya que el propio sistema inmune empieza a atacar las células musculares”.
El tratamiento tiene un protocolo de administración del medicamento para que la persona tenga una recuperación satisfactoria y dársele egreso para su posterior recuperación en su hogar.