Bloomberg — El CEO de Paramount Global, Bob Bakish, instó a los empleados a mantenerse centrados en su trabajo en medio de los continuos cambios en el negocio de los medios de comunicación y de un posible cambio en el control de la empresa.
“En medio de todo este cambio, no es sorprendente que Paramount siga siendo objeto de especulación”, dijo Bakish a los empleados en el ayuntamiento de la empresa el jueves. “Somos una empresa pública con historia en un sector muy seguido. Pero siempre he creído que lo mejor que podemos hacer es concentrarnos en lo que podemos controlar: la ejecución.”
Las prioridades estratégicas para el próximo año incluirán hacer menos programas originales para audiencias extranjeras, de modo que la empresa pueda centrarse en sus franquicias globales más significativas, según una copia de sus declaraciones revisada por Bloomberg.
En el negocio del streaming, Paramount “se inclinará aún más hacia grandes mercados como EE.UU., Reino Unido, Canadá y Australia, donde tenemos una fuerte presencia multiplataforma, el contenido de nuestros estudios estadounidenses resuena mejor y donde existe el mayor potencial de ingresos”, dijo Bakish. Reiteró que 2022 era el año de máxima inversión para el servicio de streaming Paramount+ de la empresa.
Bakish dijo que su objetivo es impulsar el crecimiento de los beneficios, que vendrá de aumentar los ingresos y “gestionar estrechamente los costos”. Se espera que el gigante neoyorquino de los medios de comunicación inicie otra ronda de despidos este año.
Paramount, propietaria de CBS, Nickelodeon y otros canales, se ha enfrentado a retos a medida que los espectadores pasan de la TV tradicional a las ofertas en línea. La publicidad en las cadenas de televisión ha sido escasa y el servicio de streaming insignia de la empresa ha seguido perdiendo dinero.
Bloomberg News informó el miércoles de que el productor de cine y televisión David Ellison había hecho una oferta preliminar para adquirir National Amusements Inc, el holding a través del cual la familia Redstone controla Paramount. Ambas partes han contratado asesores y están compartiendo información financiera, pero el acuerdo no es seguro.
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