LatAm tiene menor adopción de trabajo remoto global: ¿qué esquema se impone en 2024?

Luego de la pandemia, la participación del trabajo 100% presencial cayó del 66% al 19% en Latinoamérica, mostrando particularidades dependiendo del país y del tipo de industria

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Bloomberg Línea — Luego del ‘boom’ generado en la pandemia, Latinoamérica ahora figura como la región con menor adopción de trabajo remoto con una contribución de apenas el 10%, lo que contrasta con la realidad de Europa, Oriente Medio y África (EMEA), en donde su contribución es del 29%, mayor al esquema presencial (17%), de acuerdo con un informe de la firma multinacional de servicios inmobiliarios JLL.

Después de Europa, Oriente Medio y África, las regiones más fuertes en la adopción del trabajo remoto son Asia-Pacífico o APAC (25%) y Norteamérica (24%), según el reporte El futuro del trabajo: Esquemas de trabajo en Latinoamérica.

En Latinoamérica, el trabajo presencial tiene una contribución del 19% y el modelo híbrido es predominante con el 71%, de acuerdo con cifras recopiladas por JLL hasta el tercer trimestre de 2023.

De hecho, la contribución del modelo híbrido en Latinoamérica es el más alto entre las regiones analizadas, puesto que en Europa, Oriente Medio y África fue adoptado por el 54% de las organizaciones, en Asia-Pacífico por el 44% y en Norteamérica por el 41%.

“Esto podría atribuirse al balance entre una arraigada cultura de trabajo presencial y soluciones acordes a los desafíos urbanos de las grandes ciudades latinoamericanas en materia de transporte público y congestión vehicular”, según el reporte.

Los resultados del informe hacen parte de una encuesta realizada a cerca de 300 empresas en 13 países de Latinoamérica sobre sus esquemas de trabajo.

Los modelos de trabajo híbridos más populares en la región

En la región, un 29% de las empresas apelan a un esquema híbrido compuesto de dos días presenciales y tres remotos, siendo el más popular entre las organizaciones consultadas para el reporte, especialmente aquellas con más de 750 empleados, multinacionales y compañías de los sectores financieros y seguros y de tecnología y telecomunicaciones.

Por países, Brasil destaca con un 45% de las empresas que operan bajo este esquema.

Y el segundo esquema híbrido más popular entre las empresas en Latinoamérica consiste de dos días remotos y tres presenciales, con un 18% de las organizaciones adoptándolo.

Según JLL, “estos dos esquemas, que antes de la pandemia tenían un tercio de participación en el espectro híbrido, duplicaron su relevancia, superando por un amplio margen al esquema híbrido más popular hace cuatro años: un día remoto a la semana”.

La presencialidad cada vez pierde más fuerza

Luego de la pandemia, la participación del trabajo 100% presencial cayó del 66% al 19% en Latinoamérica, mostrando particularidades dependiendo del país y del tipo de industria.

En México, por ejemplo, el 31% de las empresas apelan al modelo presencial, mientras que Argentina es el país con menor participación del esquema presencial tanto antes como después de la pandemia, dice el informe.

Por sectores, se tiene que el modelo presencial tiene mayor acogida en industria, manufactura y logística, y construcción y bienes raíces.

En todo caso, en el 85% de los casos el empleador es el responsable de imponer el modelo 100% presencial. Entre tanto, los esquemas con dos o más días remotos son resultado de común acuerdo en al menos el 50% de los casos.

En opinión de los autores del informe, esto sugiere una demanda por flexibilidad del lado de los trabajadores.

¿Cuál es el esquema de trabajo óptimo?

En medio de los cambios de las dinámicas empresariales, la mitad de las empresas aún están por definir su esquema de trabajo óptimo y ante este “alto grado de incertidumbre” sobre esa decisión “resalta la dificultad para estimar la demanda futura por oficinas”, según JLL.

“Hasta el momento, ha primado la cautela entre los desarrolladores e inversionistas en los principales mercados de oficinas de la región, como se aprecia en la caída en el ritmo de producción de nuevo inventario, la disminución del volumen transaccional y el incremento en las tasas de capitalización para este tipo de activo”, indicó.

Entre las compañías que esperan migrar de modelo, un 3% prevé hacerlo hacia un esquema más remoto, mientras que el 12% incorporarán más días de trabajo presencial.

Y de este último grupo, un 70% está compuesto por empresas que actualmente operan bajo esquemas híbridos con dos o tres días de trabajo remoto.