Bloomberg — El coro de críticos de Boeing Co. (BA) se hizo más fuerte cuando el jefe de American Airlines Group Inc. (AAL) señaló al fabricante de aviones por una serie de fallas de calidad que han dejado en tierra aeronaves y han trastornado las operaciones de numerosas compañías.
“Necesitamos que produzcan un producto de calidad cada vez”, dijo Robert Isom, CEO de American, el jueves en CNBC. “Necesitamos que todos en Boeing se pongan las pilas”.
Isom se une a sus homólogos de Alaska Air Group Inc. (ALK) y United Airlines Holdings Inc., (UAL) quienes han expresado su frustración en privado y públicamente en los últimos días por la crisis que envuelve al fabricante de aeronaves. Un avión Boeing 737 Max 9 sufrió un grave accidente de seguridad a principios de este mes, lo que llevó a las autoridades a dejar en tierra el modelo y aumentar la supervisión de la fabricación de la compañía.
Los problemas para las aerolíneas son más profundos que la simple irritación. Alaska dijo el jueves que sufriría una pérdida de US$150 millones por la inmovilización y se vería obligada a frenar sus planes de crecimiento. Southwest Airlines Co. dijo que ya no espera recibir el avión más pequeño Max 7 este año y redujo el número de entregas de aviones que espera “debido a los continuos desafíos de la cadena de suministro de Boeing”.
United citó la incapacidad de Boeing para cumplir con las obligaciones contractuales cuando la aerolínea anunció esta semana que había eliminado el Max 10, que aún no había sido entregado, de sus planes internos.
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