Bloomberg — Los precios pagados a los productores estadounidenses extendieron su retroceso en diciembre, lo que llevó a los operadores a aumentar las apuestas sobre cuán agresivamente la Reserva Federal recortará las tasas de interés este año.
El índice de precios al productor para la demanda final disminuyó un 0.1% por tercer mes consecutivo, la racha más larga desde 2020, mientras que el llamado índice principal de precios al productor (que excluye alimentos y energía) apenas cambió por tercer mes, mostraron datos del Departamento de Trabajo el viernes. En términos anuales, el indicador principal subió un 1.8%, el menor avance desde finales de 2020.
Los futuros de acciones redujeron las pérdidas mientras que el rendimiento del bono del Tesoro a dos años cayó al nivel más bajo desde mayo. Los operadores aumentaron las apuestas de que la Fed comenzará a recortar las tasas de interés en marzo.
Una de las razones por las que los economistas de la Fed y en Wall Street analizan el informe del índice de precios al productor es porque varias categorías, incluidas las relacionadas con la gestión de carteras y la atención médica, se utilizan para informar la medida de inflación preferida por la Fed, el índice de precios del gasto de consumo personal.
Los precios de la gestión de carteras y el asesoramiento de inversiones aumentaron, mientras que las categorías relacionadas con la atención médica apenas tuvieron cambios. Las cifras pueden ayudar a respaldar estimaciones de una lectura más suave del índice de precios del gasto de consumo personal, que se publicará el 26 de enero, justo días antes de la primera reunión de política monetaria de la Fed en 2024.
Las cifras siguen a datos separados publicados el jueves que mostraron que los precios al consumidor aceleraron en el año hasta diciembre en su mayor nivel en tres meses, indicando que el camino para controlar la inflación se está volviendo complicado. Los desarrollos geopolíticos también podrían frenar ese progreso, como lo muestra el aumento de los precios del petróleo después de los ataques a los objetivos hutíes en Yemen por parte de Estados Unidos y el Reino Unido.
A pesar de esto, la Fed puede tomar consuelo en una inflación que se ha desacelerado desde su punto máximo a mediados de 2022. La tendencia de disminución de las presiones de precios, desde las puertas de las fábricas hasta los estantes de los minoristas, explica por qué los formuladores de políticas están calculando reducciones en las tasas de interés este año.
Los precios pagados a los productores de bienes disminuyeron un 0.4% en diciembre, siendo casi el 60% de eso una reducción en los precios de la energía. Mientras tanto, los costos de los servicios se mantuvieron sin cambios por tercer mes consecutivo.
Excluyendo alimentos, energía y servicios comerciales, que es una medida del índice de precios al productor menos volátil, los precios aumentaron un 0.2% en diciembre en comparación con el mes anterior, en línea con las previsiones.
Los costos de productos procesados para la demanda intermedia, que reflejan los precios anteriores en la cadena de producción, disminuyeron por tercer mes. Excluyendo alimentos y energía, los productos procesados para la demanda intermedia aumentaron, marcando el primer avance desde abril.
--Con la colaboración de Chris Middleton.
Lea más en Bloomberg.com