Bloomberg — De acuerdo con un estudio de los analistas de Barclays, en un periodo de 5 a 7 años la capacidad de fabricación china de chips se duplicará con creces si se tienen en cuenta los planes actuales de los fabricantes del país, “mucho más” de lo que prevé el mercado.
La mayoría de esa capacidad de fabricación adicional se añadirá en los tres próximos años, basándose en un análisis de cuarenta y ocho productores de chips con plantas de fabricación ubicadas en China continental, señala este estudio.
“Las empresas locales continúan estando infravaloradas”, afirmaron los analistas Joseph Zhou y Simon Coles en su nota de este jueves. “Hay muchos más fabricantes locales de semiconductores y plantas de fabricación en la China de lo que indican las fuentes más importantes del sector”.
El gigante asiático se esfuerza por alcanzar la autosuficiencia en tecnología, un objetivo que se ha dificultado tras las restricciones impuestas por EE.UU. y algunos de sus aliados en cuanto a los productos que las empresas de tecnología pueden vender en China. Las compañías del país han acelerado la adquisición de instrumentos esenciales para la elaboración de chips con el fin de respaldar el crecimiento y ampliar los suministros antes de que se produzcan nuevas restricciones.
Los principales productores de engranajes de chips, incluidos ASML Holding NV de Holanda y Tokyo Electron Ltd. de Japón, experimentaron una avalancha de pedidos desde China el año pasado.
La mayor parte de la capacidad adicional se destinará a producir chips utilizando tecnología más antigua, dijeron los analistas. Estos semiconductores heredados (de 28 nanómetros y más) están al menos una década por detrás de los chips más avanzados, pero se utilizan ampliamente en sistemas como electrodomésticos y automóviles.
En teoría, estos chips podrían causar un exceso de oferta en el mercado, dijeron los analistas de Barclays, aunque “vemos que esto ocurrirá al menos dentro de algunos años, probablemente en 2026 como muy pronto, y dependerá de la calidad lograda, así como de cualquier nueva restricción comercial. "
La ambición de China en materia de semiconductores heredados ha llamado la atención del Departamento de Comercio de Estados Unidos, que planea recopilar información sobre cuán profundamente dependientes se han vuelto las empresas estadounidenses de la tecnología china. Bloomberg News informó en diciembre que Estados Unidos podría imponer aranceles u otras restricciones comerciales para contrarrestar el impulso de China.
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