Bloomberg — Las presiones de precios subyacentes en Estados Unidos probablemente continuaron disminuyendo a medida que finalizaba el año 2023, respaldando el optimismo en la Reserva Federal sobre la trayectoria de la inflación.
Se espera que el índice de precios al consumidor, excluyendo alimentos y combustibles, una medida preferida por los economistas como un mejor indicador de la inflación subyacente, aumente un 3,8% en diciembre en comparación con el año anterior.
Esto marcaría el menor avance anual desde mayo de 2021 y muestra el progreso que la Reserva Federal ha logrado en sofocar la inflación, que durante 2022 alcanzó la mayor velocidad en 40 años.
Aunque el crecimiento de los precios todavía está por encima del objetivo del banco central, la última evaluación de la reunión de diciembre de los funcionarios mostró que reconocen que las tasas de interés probablemente han alcanzado su nivel máximo, junto con su disposición a reducir los costos de endeudamiento este año.
Al mismo tiempo, los funcionarios “reafirmaron que sería apropiado que la política se mantenga en una postura restrictiva durante algún tiempo hasta que la inflación disminuya claramente de manera sostenible”, según las minutas de la reunión.
Lo que dice Bloomberg Economics:
“Esperamos que la deflación en los precios de los bienes básicos continúe presionando tanto al índice de precios al consumidor en general como al núcleo, pero si las empresas tienen éxito en reducir sus inventarios, esa fuente de desinflación disminuirá en los próximos meses. En última instancia, la inflación del IPC núcleo probablemente se mantendrá por encima del objetivo de inflación promedio del 2% de la Fed hasta 2024, incluso a medida que el ritmo de inflación de la vivienda se desacelere”.
—Anna Wong, Stuart Paul, Eliza Winger y Estelle Ou, economistas.
El informe del IPC del gobierno se publicará el jueves y el día siguiente se publicará el índice de precios al productor. Se espera que la medida de inflación mayorista, excluyendo alimentos y energía, también se enfríe en términos anuales.
Los banqueros centrales de Estados Unidos que hablarán en la próxima semana incluyen al presidente de la Fed de Nueva York, John Williams, y a Raphael Bostic, de la Fed de Atlanta.
En otros lugares, los datos de crecimiento del Reino Unido, los números industriales de Alemania y las decisiones de los bancos centrales desde Corea del Sur hasta Perú mantendrán la atención de los inversores.
Asia y Australia
La región de Asia-Pacífico celebra su primera reunión de tipos de interés de 2024 el jueves, cuando el Banco de Corea se reúna.
Los economistas no esperan un cambio de política en Corea del Sur, centrándose, en cambio, en si las autoridades mantienen su postura restrictiva, incluso cuando la Fed comienza lentamente a cambiar de rumbo.
El Banco de Japón tiene algunas estadísticas clave para analizar. El martes, se prevé que los precios al consumidor de Tokio, un indicador líder de la tendencia nacional, muestren una desaceleración de la inflación en diciembre.
También ese día es probable que el gasto de los hogares vuelva a caer en noviembre y los datos del día siguiente pueden mostrar por qué: las ganancias salariales aún están rezagadas frente a los aumentos en el costo de vida.
Se espera que las ventas minoristas de Australia repunten en las cifras que se publicarán el martes, junto con las aprobaciones de construcción, y que se publiquen los datos de inflación el miércoles y el comercio el jueves.
El viernes se publicarán los precios al consumidor y al productor de China, así como la inflación al consumidor y la producción industrial de la India para diciembre y noviembre, respectivamente. Los datos comerciales de Filipinas se publicarán entre el lunes y el jueves.
Europa, Oriente Medio, África
Los informes de manufactura atraerán la mayor atención en la zona euro en la próxima semana, ya que se publicarán datos industriales en sus economías más grandes.
Es especialmente relevante que Alemania, el miembro más importante de la zona euro, publique las órdenes de fábrica el lunes y los números de producción el martes.
Se espera que ambas medidas muestren pequeñas mejoras en noviembre en comparación con los niveles más bajos en tres años o cerca de ellos, durante un trimestre en el que la mayoría estimaba que el país estaba en recesión.
Para la región euro en su conjunto, la confianza económica el lunes y el desempleo el martes pueden atraer la mayor atención.
El Banco Central Europeo tiende a empezar el año tranquilamente y 2024 no es una excepción. Solo están programadas unas pocas apariciones, incluida la del jefe del banco central francés, Francois Villeroy de Galhau, el martes; el vicepresidente Luis de Guindos y miembro del Comité Ejecutivo, Isabel Schnabel, el miércoles; y el economista jefe del BCE, Philip Lane, el viernes.
En el Reino Unido, el gobernador del Banco de Inglaterra, Andrew Bailey, y sus colegas testificarán ante el parlamento sobre la estabilidad financiera el miércoles. Dos días después, se publicará el producto interno bruto de noviembre, con una recuperación parcial esperada por los economistas después de la caída de octubre.
Suiza publica cifras de inflación el lunes, que pueden mostrar una aceleración leve, aunque siguen estando cómodamente por debajo del techo del 2% establecido por el Banco Nacional de Suiza por séptimo mes consecutivo.
En Europa del Este, se programan tres decisiones monetarias:
- El miércoles, es probable que el banco central de Polonia extienda una pausa en las reducciones de tasas después del plan del Gobierno de aumentar el gasto presupuestario y debido a que la inflación se mantiene elevada.
- Los funcionarios serbios pueden mantener las tasas de endeudamiento en espera el jueves, mientras prevén una recuperación de la inflación a su banda de tolerancia.
- Y el viernes, el banco central de Rumania también se espera que deje las tasas en 7%, ya que los responsables de la política monetaria observan una inflación resurgente debido a cambios impositivos en la primera parte de 2024.
El mismo día se publicará el último dato de crecimiento de los precios al consumidor de Hungría, con una desaceleración al 5,9% prevista por los economistas. Eso sigue siendo más rápido que todos los países de la zona euro, excepto vecina Eslovaquia.
Los datos de inflación de diciembre de Rusia se publicarán el viernes y es probable que el resultado supere el 7%, mucho más que el 4% establecido como objetivo por los funcionarios.
Volviendo a África, Ghana, el segundo mayor productor de cacao del mundo, probablemente revelará una quinta desaceleración mensual de la inflación el miércoles, en parte debido a una moneda relativamente estable.
El mismo día, los inversores seguirán de cerca los datos de precios de Egipto para diciembre. Aunque la inflación allí ha disminuido desde un máximo histórico, el costo de productos básicos como el azúcar está aumentando rápidamente. Una nueva ronda de presiones inflacionarias está en el horizonte después de aumentos de tarifas en servicios clave, desde la electricidad hasta el transporte, y a medida que el país se prepara para otra posible devaluación de la moneda.
América Latina
Cinco de las principales economías de América Latina informarán sobre los precios al consumidor de diciembre en la próxima semana, encabezadas por Chile el lunes. Los economistas esperan que la deflación mensual arrastre la cifra anual completa a no más del 4,4%, lo que sería suficiente para mantener en marcha el ciclo de flexibilización del banco central.
En México, es posible que la inflación se haya acelerado por segundo mes debido al gasto relacionado con las vacaciones, lo que podría mantener al banco central de postura conservadora en un 11,25% durante más tiempo de lo esperado anteriormente.
La inflación colombiana puede haber disminuido sustancialmente al finalizar 2023, casi 400 puntos base por debajo del máximo del ciclo, lo que posiblemente abre la puerta a un recorte de medio punto en la tasa en la reunión del banco central el 31 de enero.
El jueves, en Brasil, los economistas encuestados por el banco central esperan que la inflación anual cierre 2023 en un 4,46%, por encima del objetivo del 3,25%, pero dentro del rango objetivo del 1,75% al 4,75% después de haberlo incumplido en 2021 y 2022.
En Argentina, cumpliendo con la promesa del presidente Javier Milei de dar a los ciudadanos la “verdad incómoda”, el portavoz principal del gobierno dijo que la inflación mensual de diciembre probablemente rondaría el 30%, lo que implicaría una tasa anual de fin de año del 222%, frente al 160% en noviembre.
Para cerrar la semana, el banco central de Perú seguramente reducirá la tasa clave por quinta vez consecutiva el jueves, al 6,5%, ya que su ministro de finanzas espera que la inflación cierre 2024 en 2%, comparado con el 3,24% en 2023.
—Con la ayuda de Paul Abelsky, Brian Fowler, Robert Jameson, Laura Dhillon Kane, Piotr Skolimowski y Monique Vanek.
Lea más en Bloomberg.com
