Bloomberg — Los activos de los mercados emergentes están comenzando el nuevo año en una nota más débil, lastrados por las preocupaciones sobre la estancamiento económico de China.
El índice de referencia de MSCI Inc. para las acciones de los países en desarrollo cayó por primera vez en siete días, mientras que el índice de divisas cayó por primera vez en ocho. Los swaps de incumplimiento crediticio que protegen contra los riesgos de pago entre 22 emisores soberanos se ampliaron durante un tercer día, la racha más larga desde finales de noviembre.
Las acciones chinas tuvieron el peor comienzo de año desde 2019 y el yuan cayó más desde junio, ya que los débiles datos de fabricación y ventas de viviendas indicaron que la desaceleración del crecimiento en la segunda economía más grande del mundo está lejos de terminar. La rara admisión del presidente Xi Jinping de los desafíos económicos del país también pesó sobre el sentimiento de los inversores.
“Las cifras del índice de gerentes de compras indican una desaceleración en la recuperación económica de China en los últimos meses del año”, escribió Stephen Innes, socio gerente de SPI Asset Management, en una nota. Esto “presionará a los responsables de la política fiscal y monetaria a tomar medidas urgentes. China necesita algo más que estimular la actividad económica, necesita una reforma fundamental del motor de crecimiento subyacente”.
Las últimas publicaciones de datos mostraron que la actividad fabril de China se contrajo en diciembre hasta el nivel más bajo en seis meses y la caída en las ventas de viviendas se aceleró. La mayoría de los países de Asia también experimentaron una desaceleración en los nuevos pedidos y los volúmenes de producción en diciembre, debido a una menor demanda de China.
Los mercados emergentes terminaron el año 2023 en una nota alta, impulsados por una recuperación tardía en medio de un dólar estadounidense debilitado. El índice MSCI Emerging Markets de acciones subió un 7% el año pasado después de haber caído casi un 5%. El índice de divisas registró una ganancia anual del 4.8%, mientras que una medida de Bloomberg de la deuda soberana en dólares se recuperó un 11%.
Los movimientos de hoy, sin embargo, señalaron las preocupaciones más amplias de los inversores que llevaron a amplias fluctuaciones el año pasado y que continúan en la actualidad. Además de la recuperación económica heterogénea de China, la disparidad entre las expectativas del mercado de recortes de tasas de interés de la Reserva Federal y las proyecciones propias del banco central amenaza con mantener volátiles a los activos financieros.
Los inversores estarán atentos a las publicaciones de datos el martes sobre el comercio brasileño, la actividad económica chilena y las tendencias manufacturera mexicanas. Mientras tanto, también están observando las tensiones en el Medio Oriente: incluso cuando Israel retiró algunas tropas de Gaza, Irán envió un buque de guerra al Mar Rojo en una posible escalada.
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