Bloomberg — El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, cumple su primer año de gobierno en un país aún más enfrentado políticamente que tras su victoria en las urnas, según un nuevo sondeo.
Su nivel de aprobación se ha mostrado relativamente estable a lo largo del 2023, con un 56% en el mes de diciembre y 54% en febrero, según un sondeo de Quaest divulgado este miércoles. Sin embargo, el porcentaje de brasileños que no aprueba la gestión del líder de la izquierda ha crecido hasta un 43%, en comparación con el 28% observado durante el mismo periodo.
Lula retornó una vez más al poder tras derrotar en 2022 a su antecesor, el conservador Jair Bolsonaro, en uno de los triunfos más estrechos de la historia moderna brasileña. Una encarnizada batalla en los comicios, que contó con falsas denuncias de fraude en las urnas por parte del entonces presidente y sus allegados, provocó cicatrices perdurables en el país más poblado de Latinoamérica.
Días después de la investidura del presidente Lula, de 78 años, seguidores radicales de Bolsonaro irrumpieron en edificios del gobierno en Brasilia, argumentando que Lula había robado las elecciones.
Desde entonces, una economía más fuerte de lo esperado y importantes victorias legislativas han ayudado a Lula a mantener su popularidad entre su base. Sin embargo, hasta ahora no ha podido lograr avances duraderos con la oposición.
4/ Esta aparente estabilidade esconde, porém, fragilidades del gobierno. Enquanto a maioria que aprueba o gobernador o considera bom; a mayoria que desaprova o considera péssimo. A reprovação parece ódio, a aprovação não parece paixão. pic.twitter.com/kqiYMazOkv Felipe Nunes (@profFelipeNunes) 20 de diciembre de 2023.
Incluso la aparente estabilidad en los índices de aprobación del gobierno no debería ser motivo de celebración, advirtió Felipe Nunes, director de Quaest.
“Mientras la mayoría que aprueba el gobierno lo considera bueno, quienes lo desaprueban lo consideran terrible”, escribió en las redes sociales. “La desaprobación parece odio, la aprobación no parece pasión”.
Entre los encuestados, el 47% evaluó el gobierno de Lula como “terrible”, mientras que el 20% dijo que era “malo”, según la encuesta. Como se espera que la economía se desacelere, la próxima gran elección para Lula y el gobernante Partido de los Trabajadores será en las elecciones municipales de 2024.
Quaest entrevistó a 2.012 brasileños entre el 14 y el 18 de diciembre y tiene un margen de error de 2,2 puntos porcentuales.
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