Bloomberg — Israel pidió la evacuación de las zonas de Gaza en las que, según afirma, se esconden dirigentes de Hamás, lo que indica que planea intensificar los ataques en el sur del enclave palestino.
Las Fuerzas de Defensa de Israel ordenaron el domingo a los palestinos que abandonaran las zonas cercanas a Jan Yunis, la ciudad meridional donde Israel cree que se esconden los principales militantes de Hamás.
Estados Unidos, preocupado por el elevado número de víctimas civiles en Gaza, ha instado a Israel a crear zonas seguras para los civiles que huyen, e Israel afirma haberlo hecho.
Israel retiró el sábado a sus funcionarios de Qatar, donde las negociaciones habían desembocado anteriormente en una tregua de siete días acompañada de intercambios de rehenes por prisioneros palestinos.
Al ordenar a su equipo que regresara a casa, Israel dijo que Hamás había incumplido su promesa de liberar a las mujeres y niños retenidos desde los atentados del 7 de octubre en el sur de Israel. Estados Unidos y la Unión Europea consideran a Hamás un grupo terrorista.
Unas 1.200 personas, en su mayoría civiles, murieron cuando Hamás asaltó en octubre ciudades israelíes, kibutzim, bases del ejército y un festival de música. La violenta incursión desencadenó el bombardeo y la invasión israelíes de Gaza, que se acercan ya a su segundo mes. El Ministerio de Sanidad de Gaza, dirigido por Hamás, afirma que han muerto más de 15.500 personas, la mayoría mujeres y niños.
En el día de ayer, las FDI afirmaron que seguían atacando presuntos objetivos de Hamás desde aviones de combate, helicópteros y desde el mar. Hamás ha respondido con un intenso lanzamiento de cohetes hacia el sur y el centro de Israel. Se reanudaron los tiroteos en la frontera entre Israel y Líbano, y un vehículo militar israelí fue alcanzado por un misil antitanque.
Eylon Levy, portavoz del gobierno israelí, declaró que 398 soldados y 59 policías israelíes habían muerto desde el comienzo de la guerra y que se habían disparado 11.000 cohetes contra Israel, de los cuales 2.000 no alcanzaron su objetivo y cayeron en Gaza. Añadió que se han encontrado 800 túneles utilizados por Hamás y se han destruido 500.
Tras los intercambios de la semana pasada, quedan 137 rehenes en Gaza, de los cuales 117 son varones, entre ellos dos niños. Todos menos 11 son israelíes, dijo, añadiendo que tres cuerpos de rehenes han sido localizados por el ministerio y seis personas siguen desaparecidas.
Condiciones atroces
Levy dijo que las condiciones en las que se mantenía a los rehenes eran “atroces”, ya que un niño fue devuelto “cubierto de piojos”, mientras que dos ancianas dijeron que estaban retenidas en túneles húmedos con acceso limitado a aire fresco y alimentos.
Israel está dispuesto a considerar nuevas ofertas de Hamás para liberar a los rehenes restantes, afirmó.
A pesar de las advertencias de múltiples funcionarios estadounidenses, entre ellos el secretario de Defensa, Lloyd Austin, y la vicepresidenta, Kamala Harris, para que Israel tenga en cuenta las advertencias sobre víctimas civiles, Levy dijo que “Israel y Estados Unidos coinciden en los objetivos de esta guerra”.
“He presionado personalmente a los dirigentes israelíes para que eviten víctimas civiles y para que huyan de la retórica irresponsable”, declaró el sábado Austin, ex comandante de combate en Irak y Afganistán. “En este tipo de combates, el centro de gravedad es la población civil. Y si los echas en brazos del enemigo, sustituyes una victoria táctica por una derrota estratégica.”
Muchos países han advertido a Israel de que no utilice en el sur una fuerza tan abrumadora como la que empleó en el norte, donde arrasó gran parte de la ciudad de Gaza.
“Estamos intentando ser lo más quirúrgicos posible en una situación de combate muy difícil”, declaró el domingo a la BBC Mark Regev, un alto asesor de Netanyahu. Añadió que las estimaciones de víctimas de las autoridades sanitarias de Gaza “deben tomarse con pinzas”.
John Kirby, portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de Estados Unidos, afirmó que Israel ha dado “un paso en la dirección correcta” al ser consciente de las bajas civiles.
“De hecho, han dado a los civiles de Gaza una lista, un mapa en línea, una lista de zonas a las que pueden ir para estar más seguros”, dijo Kirby el domingo en la NBC. “No hay muchos ejércitos modernos que antes de llevar a cabo operaciones hagan eso”.
No obstante, Netanyahu sugirió que se está produciendo una escalada significativa en el sur, ya que Israel pretende destruir a Hamás, el objetivo declarado de la guerra.
“Continuaremos la guerra hasta que alcancemos todos sus objetivos, y es imposible alcanzarlos sin la operación terrestre”, dijo en una conferencia de prensa televisada.
Pero el combate en el sur es ahora más difícil debido al desplazamiento de unos 1,8 millones de personas, muchas de las cuales huyeron allí para evitar los intensos combates anteriores en el norte, según cifras de Naciones Unidas.
“Está claro que la primera fase de la operación, antes del alto el fuego, tuvo un coste enorme”, afirmó Brian Katulis, vicepresidente de política del Middle East Institute de Washington. “A mucha de esa gente se le dijo que se desplazara hacia el sur. Ahora la campaña se está desplazando hacia el sur. Y esa es la verdadera preocupación que tiene mucha gente en la administración”.
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