Bloomberg — El gobierno de Israel dijo el domingo 19 de noviembre que los rebeldes hutíes respaldados por Irán en Yemen secuestraron un barco de carga en el Mar Rojo, poniendo en peligro una ruta marítima mundial clave.
La oficina del primer ministro Benjamín Netanyahu condenó la incautación de lo que dijo era un barco propiedad de una empresa británica y operado por una empresa japonesa, sin nombrar a ninguno de ellos.
No había ningún israelí entre los 25 miembros de la tripulación del barco, dijo.
Los rebeldes hutíes de Yemen han amenazado con atacar a Israel desde que comenzó su guerra contra el grupo militante palestino Hamás a principios de octubre, y han lanzado ataques fallidos con misiles que se creía que tenían como objetivo a Israel.
El incidente del domingo marca la primera gran escalada en la amenaza que representan los hutíes contra el transporte marítimo mundial desde que comenzó el último conflicto.
Horas antes, los rebeldes hutíes en Yemen dijeron que atacarían a los barcos que enarbolan la bandera israelí, así como a aquellos operados o pertenecientes a compañías israelíes. Un portavoz hutí, publicado en X, pidió a otros países que retiraran a los ciudadanos que trabajan en buques israelíes.
El grupo rebelde tiene su base en Yemen, lo que le permite realizar ataques contra buques comerciales en el Mar Rojo. En enero de 2022, los hutíes secuestraron un carguero con bandera de los Emiratos Árabes Unidos que transportaba suministros para un hospital de Arabia Saudita.
Se cree que los hutíes están recibiendo entrenamiento, experiencia técnica y armas cada vez más sofisticadas (incluidos drones, misiles balísticos y de crucero) de Irán.
La oficina de Netanyahu culpó del ataque del domingo al gobierno de Teherán, que según dijo está poniendo en peligro las rutas marítimas mundiales. Irán no ha comentado sobre el incidente.
El gobierno israelí dijo que entre los miembros de la tripulación del barco hay personas de Ucrania, Bulgaria, Filipinas y México. El ejército de Israel dijo que el barco estaba en camino de Turquía a la India en el momento del ataque.
Lea más en Bloomberg.com