Bloomberg — Alemania estudia prohibir la exportación de los medicamentos de adelgazamiento más vendidos de Novo Nordisk A/S (NVO), ya que los países europeos intentan proteger el suministro en medio de una escasez mundial.
La moda en torno a dos medicamentos de Novo que pueden ayudar a las personas a perder un 15% de su peso está provocando una escasez para los pacientes a los que estaban destinados: los diabéticos.
Algunos suministros de estos fármacos, más baratos en Alemania que en otros países, se envían a otros países europeos y a Estados Unidos, según declaró Karl Broich, presidente del Instituto Federal Alemán de Medicamentos y Productos Sanitarios, en una entrevista a la revista Der Spiegel.
La agencia de Broich está hablando con los políticos sobre la posibilidad de prohibir las exportaciones si los esfuerzos actuales, incluida la concienciación sobre las limitaciones del suministro, no dan resultado.
“Necesitamos el medicamento para atender a los pacientes de diabetes y no como medicamento de estilo de vida”, declaró Broich a Spiegel. “En las redes sociales se anuncian cosas que no nos interesan en absoluto”.
Alemania no es el único país de la Unión Europea que está considerando mecanismos reguladores poco utilizados para ayudar a apuntalar el suministro del medicamento. Bélgica endureció a principios de esta semana las normas que regulan la prescripción de Ozempic y otros medicamentos similares, reservándolos para la diabetes y las personas con determinados tipos de obesidad.
En medio de este furor, los organismos reguladores estadounidenses y europeos también están tomando medidas contra la venta ilegal de estos fármacos e investigando versiones falsificadas que pueden ser perjudiciales para la salud.
La semana pasada, Eli Lilly & Co. obtuvo la autorización de EE.UU. para un medicamento similar destinado a la pérdida de peso. Broich señaló que la llegada de productos competidores debería ayudar a resolver los problemas de suministro.
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