Bloomberg — La compañía General Motors Co. (GM) no podrá determinar si logrará beneficios de hasta US$14.000 millones en 2023, ya que la huelga del sindicato United Auto Workers, que cumple su 6ª semana, hace demasiado difícil predecir su futuro financiero.
La automovilística de Detroit retiró la previsión este martes, al tiempo que presentaba unos resultados del tercer trimestre que superaban las previsiones. General Motors obtuvo un beneficio ajustado de US$2,28 por acción, por encima de las previsiones de Wall Street de US$1,84, fruto del crecimiento de su negocio en Estados Unidos y de unos precios de los vehículos en niveles récord. Sus ingresos fueron de US$44.100 millones de, cerca de US$1.000 millones más de lo previsto por diversos analistas.
Estos datos ponen de manifiesto la presión a la que la huelga ha sometido al sector, eclipsando un año que ha sido, por otra parte, sólido y en el que el fabricante de vehículos ha incrementado su participación en el mercado. General Motors ha superado las previsiones para el tercer trimestre pese a las pérdidas de US$200 millones ocasionadas por esta huelga.
Hasta el momento, los costes de esta huelga ascienden a US$800 millones. La empresa prevé unos US$200 millones por semana en costes adicionales ligados a la huelga en lo sucesivo.
Un negociador del UAW dijo la semana pasada que las dos partes estaban avanzando poco a poco hacia un acuerdo tentativo, pero la retirada de la orientación muestra que el final de la huelga es tan impredecible como el presidente del UAW, Shawn Fain, quien ha mantenido a GM, Ford Motor Co. (F) y Stellantis NV (STLA) adivinando detener el trabajo en plantas seleccionadas.
“No vamos a firmar un acuerdo que no nos permita ser competitivos”, dijo el director financiero de GM, Paul Jacobson, en una entrevista con Bloomberg Television.
El viernes, Fain dijo que el sindicato estaba cerca de llegar a un acuerdo con los tres fabricantes de automóviles, pero que había “más que ganar”. El sindicato tiene sobre la mesa aumentos del 23% de los tres fabricantes de automóviles, pero quiere un aumento del 25% , dijeron a Bloomberg personas familiarizadas con el asunto a principios de este mes.
La CEO, Mary Barra, dijo en una carta a los accionistas que GM necesita un acuerdo que le permita a la compañía alcanzar objetivos de margen de beneficio ajustado del 8% al 10% en América del Norte.
“Aceptar costos insosteniblemente altos pondría en riesgo nuestro futuro y los empleos de los miembros del equipo de GM, y poner en peligro nuestro futuro es algo que no haré”, dijo.
La huelga erosiona las ganancias
Las ganancias del tercer trimestre de GM cayeron en comparación con el mismo período del año pasado. Los ingresos netos cayeron US$241 millones a US$3.100 millones. Esto se debió principalmente a los costos de huelga, aunque los mayores costos de piezas de repuesto desempeñaron un papel menor.
“Creemos que GM debería poder compensar la mayor parte del aumento salarial impulsado por el UAW”, dijo Chris McNally, analista de Evercore ISI con una calificación de “rendimiento superior” para la acción, en una nota de investigación para clientes. McNally dijo que la decisión de suspender las previsiones para todo el año no era motivo de preocupación. “¿Por qué darle al UAW información anticipada mientras las negociaciones continúan?”
GM cayó un 0,6% a US$29,05 a las 9:45 am. La acción ha bajado aproximadamente un 13% en lo que va del año.
Para compensar los mayores costos laborales esperados, Barra dijo que GM planea reducir los costos fijos en US$2.000 millones a partir de 2024.
“Ha quedado claro después de Covid-19 que los salarios y beneficios en toda la economía estadounidense tendrían que aumentar debido a la inflación y otros factores”, dijo en la carta.
La compañía aumentó su flujo de caja libre automotriz en más de US$300 millones en el último trimestre a US$4.900 millones. Estaba en camino de alcanzar el extremo superior de su rango de orientación antes de que comenzara la huelga, dijo Jacobson.
GM proporcionará nueva orientación financiera para 2024 una vez que se ratifique un contrato sindical. El fabricante de automóviles de Detroit había proyectado previamente que las ganancias antes de intereses e impuestos para 2023 alcanzarían entre 1US$2.000 y US$14.000 millones, en comparación con su previsión anterior que alcanzaba un máximo de US$13.000 millones. También había pronosticado ganancias por acción para todo el año de entre US$7,15 y US$8,15, frente a un máximo de US$7,35 por acción anteriormente.
Desaceleración de vehículos eléctricos
El fabricante de automóviles también está reconsiderando los planes de crecimiento para los vehículos eléctricos, ya que las ventas de complementos han sido más lentas de lo previsto. GM dijo que pospondrá la apertura de su planta de camionetas eléctricas en Orion, Michigan, en las afueras de Detroit, hasta 2025, un año más tarde de lo que había previsto anteriormente. Jacobson dijo que la medida retrasará el gasto de capital en US$1.500 millones entre 2024 y 2025.
Eso significa que el objetivo anterior de GM de vender 400.000 vehículos eléctricos el próximo año no se cumplirá, pero la compañía mantiene su objetivo de fabricar 1 millón de vehículos eléctricos en EE. UU. para fines de 2025.
“A medida que avanzamos en la transformación hacia los vehículos eléctricos, hay un poco de obstáculos”, dijo Barra el martes en una conferencia telefónica con analistas.
La compañía continuará fabricando versiones alimentadas por batería de sus camionetas Chevrolet Silverado y GMC Sierra junto con la Hummer eléctrica en una planta en Detroit, pero no agregará nueva producción hasta que la compañía comprenda mejor la demanda del mercado y realice mejoras en las camionetas que impulsan su rentabilidad.
Un punto positivo es que GM es rentable en todas las regiones. Pero hay señales de problemas en algunas líneas de negocios.
Si bien las operaciones de GM en China son rentables, los ingresos del país cayeron un 42% a US$192 millones de dólares.
El aumento de las tasas de interés también ha desacelerado el crecimiento del negocio de préstamos de GM Financial, donde las ganancias cayeron un 19% a 741 millones de dólares.
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