Bloomberg — El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, instó a Pekín a utilizar su influencia en Oriente Próximo para evitar que otros actores estatales o no estatales ataquen a Israel y amplíen su guerra con Hamás, según informó el Departamento de Estado.
Blinken habló con el ministro de Asuntos Exteriores, Wang Yi, antes de partir de Riad, donde el máximo diplomático estadounidense intentaba apuntalar el apoyo a Israel entre las naciones árabes, declaró el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller.
Fue la primera llamada de ambos desde los atentados de Hamás contra Israel de hace una semana.
El enviado del presidente Joe Biden está realizando una gira diplomática relámpago por Oriente Próximo, con paradas en Israel, Qatar, Jordania, Bahréin y Emiratos Árabes Unidos, además de Arabia Saudí.
A Estados Unidos le preocupa especialmente que Hezbolá, la milicia libanesa apoyada por Irán, abra un frente adicional en la guerra de la frontera norte de Israel. China mantiene estrechas relaciones con Irán y ayudó a Teherán a negociar una histórica distensión diplomática con Arabia Saudí a principios de este año.
Wang reiteró la postura de China de que se opone a cualquier acción que perjudique a los civiles y condena todas las prácticas que violen las leyes internacionales, según un comunicado del Ministerio de Asuntos Exteriores.
“China cree que salvaguardar la propia seguridad de un país no puede hacerse a costa de perjudicar a civiles inocentes”, afirmó Wang en el comunicado. “No hay salida por medios militares, y detener la violencia con violencia sólo creará un círculo vicioso”.
Según el comunicado del ministerio, Wang instó a Estados Unidos a tomar la iniciativa y desempeñar un papel constructivo para impulsar soluciones políticas. Aplaudió la reciente mejora de las relaciones entre China y EE.UU. y pidió a la administración Biden que respete los principales intereses y preocupaciones de China.
La llamada del sábado, que duró cerca de una hora, fue posible en parte gracias a los contactos diplomáticos que la administración Biden ha mantenido con el líder chino Xi Jinping en los últimos meses, dijo Miller.
Esto incluyó un viaje de Blinken a Pekín en junio que reabrió las líneas de comunicación con China tras meses de tensión.
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